Buena obra de Neil Simon llevada a la pantalla por Herbert Ross, que ya hizo lo propio con la obra de Woody Allen "Play it again Sam". Seguramente el mejor Allen no realizado por él mismo.
Como obra teatral mantiene un alto nivel y su interpretes están en estado de gracia.Herbert Ross la dota de una realización hábil que la aparta del teatro filmado.
Se ve con agrado a pesar de que tono y sobretodo la música típica de los años 70 hayan hecho mella.
Richard Dreyfuss nos regala una de sus mejores interpretaciones, no en vano le dieron el Oscar, aunque en algunos momentos se arranca en alguna sobreactuación que de haberla realizado más avanzada su carrera le hubiese invalidado para merecer esa estatuilla.
La recordaba lejana en el tiempo y con un buen recuerdo, la ví a principio de los 80 en un pase televisivo y no la había vuelto a ver, me daba miedo revisarla y llevarme un chasco, pero por suerte se mantiene bien gracias al gran texto y las buenas interpretaciones.