Estupenda película con la que me aficioné al personaje de Batman y demás superhéroes. Yo, que me había criado leyendo lo más básico en cuanto a cómic se refiere (Mortadelo, Astérix, Charlie Brown etcétera) antes de verla la verdad es que no era muy de superhéroes. Bueno, me gustaba la opereta espacial (Star Trek...) y poco más. Tim Burton era (y sigue siendo) mi director favorito, pero en aquel entonces me daba un poco de pereza ver esta película o una similar. Pensaba que iba a ser todo acción y tiroteos con poca gracia, lo dicho, que por aquel entonces no estaba muy acostumbrada a ese género.

Hasta que llegó aquel viernes por la noche. Parecía un viernes como otro cualquiera. Me disponía a recuperarme después de toda una tortuosa semana de instituto mediante una película en el salón. Por casualidades de la vida me topé con ésta, de la que al ser de Tim Burton obviamente había oído hablar. Por esa razón decidí darle una oportunidad.

Y me sorprendió gratamente. Su inconfundible sello Burton se nota. Y vaya si se nota.

Si bien la interpretación de Michael Keaton como el personaje principal no pasa de correcta, me parece un Batman bastante creíble (tiene un mérito impresionante como actor al pasar de realizar el papel irreverente de Bitelchús, al tipo educado y más bien modoso que es su Bruce Wayne). Michelle Pfeiffer está estupenda como su carismática a la vez que neurótica Catwoman. Pero en mi opinión, quién se lleva la palma aquí es Danny de Vito. Adoro su personaje malvado, aterrador y cómico a partes iguales. Tan sumamente divertido y carismático él.

En fin. Una película divertida, apasionante, y que consigue a la perfección combinar noir, comedia, y fantasía. Ah, y gracias a ella se acabaron todos mis prejuicios sobre el cine de superhéroes.