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Voto de Manospondylus:
9
6,4
18.353
Aventuras. Drama
Cuenta la historia de la misión de la NASA que llevó al primer hombre a la luna, centrada en Neil Armstrong (Ryan Gosling) y el periodo comprendido entre los años 1961 y 1969. Un relato en primera persona, basado en la novela de James R. Hansen, que explora el sacrificio y el precio que representó, tanto para Armstrong como para los Estados Unidos, una de las misiones más peligrosas e importantes de la historia de la humanidad. (FILMAFFINITY) [+]
20 de julio de 2019
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El 17 de diciembre de 1903, el Wright Flyer de los hermanos Wright alzó el vuelo recorriendo 37 m sin tocar el suelo, una distancia inferior a la envergadura de las alas de un avión comercial transcontinental moderno. Ese mismo día, en su cuarto y último vuelo, logró mantenerse casi un minuto en el aire, tiempo suficiente para cubrir una distancia de 260 m. Sólo 65 años y 7 meses después, el 20 de Julio de 1969, el módulo Eagle se posaba sobre la Luna y unas horas después Neil Armstrong se convertía en la primera persona en caminar por la superficie de nuestro satélite, a unos 384.400 km de la Tierra. 50 años más tarde (que se cumplen precisamente mientras escribo esto), la humanidad no ha ido más lejos. Por supuesto, una proeza semejante merece una película a la altura y quizá First Man sea ese filme.
Por supuesto, First Man trata sobre el proyecto Gemini, el programa Apollo y, sobre todo, la vida de Neil Armstrong durante ese periodo (1961-1969), de su llegada a la Luna junto a Buzz Aldrin y de cómo afrontó tanto ese histórico momento como sus propias tragedias familiares. A quien no le interese el tema, piense que todo esto fue (y sigue siendo) un despilfarro de recursos y dinero, o directamente crea que jamás ocurrió en realidad, que sepa que esta no es su película. Por otra parte, quienes valoramos ese momento como uno de los mayores hitos humanos y tecnológicos en la historia de nuestra especie, por no mencionar que la carrera espacial, más allá de ser una competición chorra entre la URSS y USA, trajo consigo importantes avances tecnológicos, incluyendo unos 6.000 inventos que utilizamos cotidianamente (desde equipamiento médico de gran importancia a las actuales pelotas de golf), estamos ante una película imprescindible.
Por otra parte, la cuarta película de Damien Chazelle es para mucha gente un pequeño tropezón en su carrera como director. Mi opinión es muy distinta: First Man es la película que consagra a Chazelle como uno de los mejores directores de cine contemporáneos. Ya no es una joven promesa, sino una maravillosa realidad.
Como he mencionado, basada en la biografía oficial escrita por James R. Hansen y con cierto aire a documental, First Man sigue el día a día de Armstrong, tanto en su vida familiar como en su trabajo en la NASA, siempre enfocada hacia la misión lunar. Así pues, estamos frente a un filme que se centra en la cara más conocida del programa Apollo y por lo tanto es algo individualista (no olvidemos que detrás de esto había unas 400.000 personas), aunque para lo contrario ya tenemos la película Figuras Ocultas que puede servir como un complemento muy recomendable (y necesario) a esta.
Sin embargo, Fist Man ha recibido fuertes reproches, a menudo injustos, y, aunque no quiero convertir esto en una especie de contracrítica sí me voy a detener a comentar un par de los aspectos más criticados: el supuesto nacionalismo y la apariencia de los cohetes y módulos.
En primer lugar, está ese patriotismo exagerado que suele impregnar cualquier película hollywoodiense parecida. Pero no encontramos algo similar en Fist Man. No deja de ser curioso que en España se la critique por americanista mientras que en Estados Unidos se la critique por lo contrario. Obviamente, fue la NASA, agencia espacial de los Estados Unidos, y no la URSS quien llevó por primera vez a alguien a la Luna. Así que es absurdo quejarse de que la película esté desde el punto de vista estadounidense (y más concretamente del de un astronauta en particular). Sin embargo, Armstrong no se consideraba un héroe estadounidense; porque para Amstrong el logro fue de la humanidad (de ahí su famosa frase) y eso es algo que Chazelle y Gosling captan bastante bien. Mientras tanto, ha sido calificada por determinados sectores de "antipatriótica" (The Telegraph) y "antiamericana" (senadores republicanos varios), levantando la típica polémica absurda a la que tuvieron que responder tanto Ryan Gosling como los hijos de Armstrong. Porque Fist Man prescinde de las largas tomas de banderas ondeando dramáticamente al viento del atardecer (en serio, si First Man os parece de un americanocentrismo vomitivo, por vuestra salud, no veáis nada de Michael Bay), ni siquiera aparece el momento en el que clavan la bandera en la Luna (aunque puede verse en algunos planos generales al fondo). Claro que tampoco sale lo de la bolsa de orina de Aldrin y nadie se ha quejado de eso. Ni los experimentos que hicieron en la Luna, lo que no habría estado de más.
Sobre el otro asunto, es curioso como cuando a alguien no le gusta una película, se inventa defectos para dejarla en mal lugar y el ejemplo perfecto son los comentarios sobre la apariencia general de los cohetes y módulos que aparecen en esta. No, en First Man no hay "cohetes oxidados". No son tan elegantes, limpios y estilizados como la Entreprise de Star Trek o las naves de Naboo en Star Wars, pero es lo que hay. De hecho, muchos de los planos que vemos, por ejemplo en la secuencia del despegue, es material de archivo, grabaciones reales del cohete Saturno V rodadas en 70 mm.
Por otra parte, una queja que entiendo (y hasta cierto punto comparto) es que el ritmo sí es increíblemente lento y será el principal escollo para cualquier potencial audiencia. Que sea o no un elemento realmente molesto, como siempre, depende del interés que se tenga en lo que la película cuenta. Al menos, la duración no es excesiva: la película abarca 8 años del proyecto Gemini y el programa Apollo, dos horas no son tanto.
Otra pequeña pega es que, como en La Teoría del Todo (biopic de Stephen Hawking), encuentro muy detallada la parte más personal y privada del personaje histórico, pero me falta mucho trasfondo científico y tecnológico. Es cierto que ese no es el propósito de esta película, pero, aún con eso, no costaba nada meter un poco más de ciencia (que podría haber servido también para hacer divulgación).
(Continúa sin spoilers)
Por supuesto, First Man trata sobre el proyecto Gemini, el programa Apollo y, sobre todo, la vida de Neil Armstrong durante ese periodo (1961-1969), de su llegada a la Luna junto a Buzz Aldrin y de cómo afrontó tanto ese histórico momento como sus propias tragedias familiares. A quien no le interese el tema, piense que todo esto fue (y sigue siendo) un despilfarro de recursos y dinero, o directamente crea que jamás ocurrió en realidad, que sepa que esta no es su película. Por otra parte, quienes valoramos ese momento como uno de los mayores hitos humanos y tecnológicos en la historia de nuestra especie, por no mencionar que la carrera espacial, más allá de ser una competición chorra entre la URSS y USA, trajo consigo importantes avances tecnológicos, incluyendo unos 6.000 inventos que utilizamos cotidianamente (desde equipamiento médico de gran importancia a las actuales pelotas de golf), estamos ante una película imprescindible.
Por otra parte, la cuarta película de Damien Chazelle es para mucha gente un pequeño tropezón en su carrera como director. Mi opinión es muy distinta: First Man es la película que consagra a Chazelle como uno de los mejores directores de cine contemporáneos. Ya no es una joven promesa, sino una maravillosa realidad.
Como he mencionado, basada en la biografía oficial escrita por James R. Hansen y con cierto aire a documental, First Man sigue el día a día de Armstrong, tanto en su vida familiar como en su trabajo en la NASA, siempre enfocada hacia la misión lunar. Así pues, estamos frente a un filme que se centra en la cara más conocida del programa Apollo y por lo tanto es algo individualista (no olvidemos que detrás de esto había unas 400.000 personas), aunque para lo contrario ya tenemos la película Figuras Ocultas que puede servir como un complemento muy recomendable (y necesario) a esta.
Sin embargo, Fist Man ha recibido fuertes reproches, a menudo injustos, y, aunque no quiero convertir esto en una especie de contracrítica sí me voy a detener a comentar un par de los aspectos más criticados: el supuesto nacionalismo y la apariencia de los cohetes y módulos.
En primer lugar, está ese patriotismo exagerado que suele impregnar cualquier película hollywoodiense parecida. Pero no encontramos algo similar en Fist Man. No deja de ser curioso que en España se la critique por americanista mientras que en Estados Unidos se la critique por lo contrario. Obviamente, fue la NASA, agencia espacial de los Estados Unidos, y no la URSS quien llevó por primera vez a alguien a la Luna. Así que es absurdo quejarse de que la película esté desde el punto de vista estadounidense (y más concretamente del de un astronauta en particular). Sin embargo, Armstrong no se consideraba un héroe estadounidense; porque para Amstrong el logro fue de la humanidad (de ahí su famosa frase) y eso es algo que Chazelle y Gosling captan bastante bien. Mientras tanto, ha sido calificada por determinados sectores de "antipatriótica" (The Telegraph) y "antiamericana" (senadores republicanos varios), levantando la típica polémica absurda a la que tuvieron que responder tanto Ryan Gosling como los hijos de Armstrong. Porque Fist Man prescinde de las largas tomas de banderas ondeando dramáticamente al viento del atardecer (en serio, si First Man os parece de un americanocentrismo vomitivo, por vuestra salud, no veáis nada de Michael Bay), ni siquiera aparece el momento en el que clavan la bandera en la Luna (aunque puede verse en algunos planos generales al fondo). Claro que tampoco sale lo de la bolsa de orina de Aldrin y nadie se ha quejado de eso. Ni los experimentos que hicieron en la Luna, lo que no habría estado de más.
Sobre el otro asunto, es curioso como cuando a alguien no le gusta una película, se inventa defectos para dejarla en mal lugar y el ejemplo perfecto son los comentarios sobre la apariencia general de los cohetes y módulos que aparecen en esta. No, en First Man no hay "cohetes oxidados". No son tan elegantes, limpios y estilizados como la Entreprise de Star Trek o las naves de Naboo en Star Wars, pero es lo que hay. De hecho, muchos de los planos que vemos, por ejemplo en la secuencia del despegue, es material de archivo, grabaciones reales del cohete Saturno V rodadas en 70 mm.
Por otra parte, una queja que entiendo (y hasta cierto punto comparto) es que el ritmo sí es increíblemente lento y será el principal escollo para cualquier potencial audiencia. Que sea o no un elemento realmente molesto, como siempre, depende del interés que se tenga en lo que la película cuenta. Al menos, la duración no es excesiva: la película abarca 8 años del proyecto Gemini y el programa Apollo, dos horas no son tanto.
Otra pequeña pega es que, como en La Teoría del Todo (biopic de Stephen Hawking), encuentro muy detallada la parte más personal y privada del personaje histórico, pero me falta mucho trasfondo científico y tecnológico. Es cierto que ese no es el propósito de esta película, pero, aún con eso, no costaba nada meter un poco más de ciencia (que podría haber servido también para hacer divulgación).
(Continúa sin spoilers)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Respecto al reparto, Gosling es uno de los rostros más conocidos de Hollywood y no termino de verle el parecido a Armstrong. Por otro lado, su interpretación, tachada de inexpresiva, se ajusta bastante a lo que debe ser, pues Amstrong siempre tuvo fama de ser inexpresivo, retraído y un tanto estoico. Claire Foy, por su parte, está inmensa. Corey Stoll clava a Aldrin y el resto del elenco cumple con solvencia, sin excepciones.
Otro asunto que no puedo dejar pasar es el peculiar apartado visual de este filme, con su imagen de baja definición y sus impactantes escenas recreadas con un uso comedido del CGI, que la convierten en una película incluso más sobria que Apollo 13 y Figuras Ocultas. Pese a que el 60% del metraje tiene algún retoque por ordenador, no hay un gran despliegue artificioso de efectos digitales para asombrar durante uno o dos años y envejecer no demasiado bien (vamos, lo que suele ocurrir con el CGI), sino que se hace el uso justo y necesario combinado con efectos prácticos e imágenes de archivo, lo que, sumado a las cámaras subjetivas, nos sitúa en medio de la escena, ocurra en un pasillo o en un módulo lunar.
Por el tema del que se ocupa y un poco por la forma en la que lo trata, mezclando la vida familiar con la carrera espacial, es inevitable que First Man recuerde un poco a la película Apollo 13, incluso ambas películas recrean el incendio del Apollo 1 en el que murieron tres astronautas. Sin embargo, First Man es mucho menos convencional: Chazelle opta por un tono muy diferente y visualmente está más próxima a la imaginería espacial de 2001: una Odisea del Espacio e Interstellar, a las que a veces también se asemeja un poco en el tono, aunque por lo demás poco tiene que ver con estas obras de ciencia ficción.
First Man está rodada en películas de 16 mm y 35 mm, con una calidad de imagen bastante mala (según los estándares actuales), lo que le da apariencia de "vieja", quizá para que las grabaciones reales de 1969 que incluye no desentonen (como ocurre en otras películas que emplean registros similares) y, además, esto otorga al filme cierto aspecto de grabación casera (seguramente para resaltar esa cercanía de lo cotidiano). Sin embargo, con una transición absolutamente impecable, da paso al IMAX y a una imagen con una definición muy alta durante la parte de la Luna.
Por último, es imprescindible una mención a la estupenda banda sonora. Justin Hurwitz compone un precioso tema principal, sencillo pero efectivo, pegadizo y sobre todo muy maleable: a ratos aparece como un vals que recuerda a "El Danubio Azul" de Johan Strauss (quizá para evocar a 2001 también en la música), lo que está bastante bien, y otras veces resuena atronadora y parece una mezcla entre la música de La La Land y la de Interstellar (durante la primera panorámica de la Luna), lo que está aún mejor.
Recapitulando, a medio camino entre el biopic y el documental, algo individualista y muy intimista, y rodada con un realismo obsesivo, First Man supone la coronación de Chazelle. El resultado es una película fascinante por muchos y diferentes motivos, aunque el principal es, sin duda, que parte de una historia que de por sí es fascinante. Y mientras tanto no faltarán quienes vean irreal la apariencia del Saturno V, aunque sea el auténtico, y quienes crean que es excesivamente o insuficientemente patriótica. Pero no se trata de americanismo o de antiamericanismo, sino de ajustarse a los hechos y a la figura de Armstrong.
Aspectos positivos: Dirección, guion, fotografía, montaje, actuaciones, banda sonora, diseño de producción... y en especial el realismo y la mesura con la que está recreado todo y su fidelidad a los hechos reales (con sólo un par de pequeñas licencias y un detalle especulativo).
Aspectos negativos: El ritmo narrativo es bastante lento y la trama se estanca en varios momentos y avanza a saltos en otros. Se obvia mucha de la investigación y del trabajo que hubo detrás del programa Apollo.
Puntuación: 8.75
Otro asunto que no puedo dejar pasar es el peculiar apartado visual de este filme, con su imagen de baja definición y sus impactantes escenas recreadas con un uso comedido del CGI, que la convierten en una película incluso más sobria que Apollo 13 y Figuras Ocultas. Pese a que el 60% del metraje tiene algún retoque por ordenador, no hay un gran despliegue artificioso de efectos digitales para asombrar durante uno o dos años y envejecer no demasiado bien (vamos, lo que suele ocurrir con el CGI), sino que se hace el uso justo y necesario combinado con efectos prácticos e imágenes de archivo, lo que, sumado a las cámaras subjetivas, nos sitúa en medio de la escena, ocurra en un pasillo o en un módulo lunar.
Por el tema del que se ocupa y un poco por la forma en la que lo trata, mezclando la vida familiar con la carrera espacial, es inevitable que First Man recuerde un poco a la película Apollo 13, incluso ambas películas recrean el incendio del Apollo 1 en el que murieron tres astronautas. Sin embargo, First Man es mucho menos convencional: Chazelle opta por un tono muy diferente y visualmente está más próxima a la imaginería espacial de 2001: una Odisea del Espacio e Interstellar, a las que a veces también se asemeja un poco en el tono, aunque por lo demás poco tiene que ver con estas obras de ciencia ficción.
First Man está rodada en películas de 16 mm y 35 mm, con una calidad de imagen bastante mala (según los estándares actuales), lo que le da apariencia de "vieja", quizá para que las grabaciones reales de 1969 que incluye no desentonen (como ocurre en otras películas que emplean registros similares) y, además, esto otorga al filme cierto aspecto de grabación casera (seguramente para resaltar esa cercanía de lo cotidiano). Sin embargo, con una transición absolutamente impecable, da paso al IMAX y a una imagen con una definición muy alta durante la parte de la Luna.
Por último, es imprescindible una mención a la estupenda banda sonora. Justin Hurwitz compone un precioso tema principal, sencillo pero efectivo, pegadizo y sobre todo muy maleable: a ratos aparece como un vals que recuerda a "El Danubio Azul" de Johan Strauss (quizá para evocar a 2001 también en la música), lo que está bastante bien, y otras veces resuena atronadora y parece una mezcla entre la música de La La Land y la de Interstellar (durante la primera panorámica de la Luna), lo que está aún mejor.
Recapitulando, a medio camino entre el biopic y el documental, algo individualista y muy intimista, y rodada con un realismo obsesivo, First Man supone la coronación de Chazelle. El resultado es una película fascinante por muchos y diferentes motivos, aunque el principal es, sin duda, que parte de una historia que de por sí es fascinante. Y mientras tanto no faltarán quienes vean irreal la apariencia del Saturno V, aunque sea el auténtico, y quienes crean que es excesivamente o insuficientemente patriótica. Pero no se trata de americanismo o de antiamericanismo, sino de ajustarse a los hechos y a la figura de Armstrong.
Aspectos positivos: Dirección, guion, fotografía, montaje, actuaciones, banda sonora, diseño de producción... y en especial el realismo y la mesura con la que está recreado todo y su fidelidad a los hechos reales (con sólo un par de pequeñas licencias y un detalle especulativo).
Aspectos negativos: El ritmo narrativo es bastante lento y la trama se estanca en varios momentos y avanza a saltos en otros. Se obvia mucha de la investigación y del trabajo que hubo detrás del programa Apollo.
Puntuación: 8.75