Si algo caracteriza la década de los 80 fue, además de la magia de sus películas, el hacer secuelas de sus éxitos. Segundas partes ya se hacían antes, pero no como norma o, más bien, hacer la primera pensando en la segunda y crear franquicias. Tanto en los 80 como en los 90 la norma básica de la secuela era como el eslogan de la película South Park: "Más grande, más larga y sin cortes". Si la primera era violenta, pues la segunda más violenta. Muchas veces esas películas han sido infravaloradas en su momento, pero revisadas a días de hoy, son tan o más buenas que la primera. A bote pronto, me viene a la cabeza El Imperio contraataca que juntamente con el Padrino II son las secuelas por excelencia que se nombran para hablar de excepciones al (mal) refrán que dice que nunca segundas partes fueron buenas. Sin embargo, hay muchas más, como Aliens el regreso, Terminator 2, Jungla de Cristal 3 La Venganza, etc.Y yo soy de los que reivindica Robocop 2 y Depredador 2 como unas segundas partes que, si bien no son mejores que las primeras, tampoco las considero peores.

Las que siempre "me han dado miedo" han sido las secuelas "tardías". Más incluso que los remakes o reboots. En la mayoría de casos lo único que han hecho ha sido destrozar la saga. Sirvan de ejemplo Star Wars (salvo Rogue One), Indiana Jones, Jungla de Cristal y ahora hay que añadir, tristemente, a Blade Runner.
Pero la magia del cine nunca desaparece del todo y de vez en cuando nos ofrece secuelas tardías que devuelven el prestigio a la franquicia que (muchas veces) se despidió dejándonos con mal sabor de boca. Me refiero a esa Obra Maestra que es Mad Max Furia en la carretera. Por suerte, no es la única.

Después de ver como las sagas de Alien y Depredador han ido perdiendo prestigio con secuelas cada vez peores (Prometheus, Covenant, Predators y, sobretodo, AvP 2 Requiem) y de que Scott nos haya privado de ver Alien 5, que pintaba muy bien al dejar fuera del canon Alien 3 y Alien Resurrección, parecía del todo imposible volver a disfrutar plenamente de una nueva entrega de nuestros enemigos extraterrestres por excelencia, pero la magia del cine ha vuelto otra vez...

The Predator es una auténtica delicia, aún con sus errores, que los tiene. Pero el conseguir no pervertir el espíritu de la saga con clasificaciones PG13 o para todos los públicos (que tanto daño han hecho a las nuevas entregas de Terminator y Jungla de Cristal) y lograr mantener la clasificación R, que tan bien le sentaron a las pelis de acción de los ochenta, es ya de por sí para aplaudir. Y si encima la historia es buena, mejor todavía. El poder disfrutar de una peli para adultos de Depredador, donde las palabrotas, la violencia y la sangre no están censuradas por esta dictadura de "lo políticamente correcto" que llevamos unos años sufriendo es algo que debemos festejar. De nuevo, gracias, Deadpool.

Y sí, he dicho "te voy a comer el coño".

P.D.: Sigo soñando con una película de AvP, pero sin humanos, sin apenas diálogos, sólo la caza. Tipo Apocalipto. Y, porqué no, también con una peli que finalice con el Depredador llevándose el cráneo y el espinazo del protagonista...