Creo que esta es una serie adictiva, con una historia tan oscura como atrayente. He disfrutado cada uno de los capítulos y de los personajes. Tatiana Maslany da, no una, sino varias lecciones de interpretación (el resto del reparto también hace un excelente trabajo a mi parecer). Una serie que no ha pecado de alargarse demasiado, que ha acabado cuando tenía que acabar y no ha rizado el rizo más de lo necesario.

Voy a tardar en encontrar algo tan bueno como esta serie. ¡Muy recomendada!