En esta película el bueno de Tarantino se nota que se lo ha pasado en grande. Tías buenas desfilando ligeras de ropa, bailes de lo más subidos de tono, escenas de carretera excelentes, música cojonuda poco conocida para la mayoría que se saca de la chistera y un desfile de pies nunca visto antes. De eso algo queda para el espectador que también se lo pasa bastante bien, aunque no tanto como el haciéndola. Siendo 70 veces mejor que su compañera de viaje (esa película freak llamada Planet Terror) no esta a la altura del resto de la filmografía del bueno de Quentin; el listón estaba demasiado alto. Aun así recomendable.