Fría película, muy en la línea de los policiacos que nos llegan de los países escandinavos, siempre lloviendo, con una luz gris y mortecina y un aspecto decididamente europeo, aunque con algún toque en la investigación del tipo "Twin Peaks".

"El Guardián Invisible" transita entre un guión complejo con muchas subtramas para despistar, demasiados personajes con poca trascendencia y una mitología y paranormalismo de garrafón propio de "Cuarto Milenio", y que chirría bastante embutida en una historia de asesinos en serie. Y el tramo final (ignoro si es así en la novela) resulta aún más postizo con una resolución, cúmulo de casualidades imposibles, absurda, artificiosa y nada creíble.

Los actores son tan fríos como el ambiente y la película, lo que afecta a su credibilidad, pareciendo, en ocasiones, resultado de una pesadilla causada por una comida indigesta. El conjunto final es un filme que se aleja del interés del espectador, al parecer ajeno al mismo.