Woody siempre ha tenido claro cuál es su labor en el mundo, y cuál es su prioridad: cuidar a su dueño, ya sea Andy o Bonnie. Pero cuando Bonnie añade a Forky, un nuevo y reluciente juguete a su habitación, arranca una nueva aventura que servirá para que los viejos y nuevos amigos le enseñen a Woody lo grande que puede ser el mundo para un juguete.


Toy Story es una serie de películas animadas por ordenador que comenzó con la película original en 1995, producida por Pixar Animation Studios y estrenada por Walt Disney Pictures, siendo el primer largometraje creado íntegramente por CGI.

La innovadora animación por ordenador tuvo un gran impacto en la industria cinematográfica. Después del debut de la película, varias industrias estaban interesadas en la tecnología usada para la película. Los fabricantes de chips gráficos deseaban calcular imágenes similares a la animación de la película para computadoras personales, los desarrolladores de juegos querían aprender a replicar la animación para videojuegos; y los investigadores de robótica estaban interesados en la construcción de inteligencia artificial en sus máquinas que en comparación con los personajes realistas en la película. Varios autores también han comparado la película con una interpretación de Don Quijote así como con el humanismo.

Las cuatro películas, producidas con un presupuesto total de más de 400 millones de dólares, han recaudado más de 1.900 millones de dólares en todo el mundo. Cada uno de los récords de taquilla de la película, con el tercero incluido en el Top 15 De Todas Las Películas Mundiales. Los críticos han dado a las cuatro películas críticas extremadamente positivas.

La serie es una de las franquicias de mayor recaudación en el mundo, y está entre las sagas más aclamadas por la crítica de todos los tiempos.


Estas películas fueron la infancia de muchos, incluyendo la mía, siempre que la pasan por televisión lo miro, la única que vi en el cine fue la 3 (en el desaparecido Cine Chaplin), siendo una gran experiencia, ya sea en el humor y en lo emocionante, especialmente el final.

Yo con Pixar siento un gran cariño, fue una gran parte de mi infancia, la primera vez que fui al cine solo fue con WALL-E (2008). Todas sus películas son disfrutables, desde su mejor trabajo a su más pasable (Cars 2). Pero, me sentí un poco enojado cuando anunciaron que se realizaría una cuarta parte de los juguetes más queridos. Sentía que era muy innecesario, porque la 3 tuvo un final perfecto y redondo. Cuando aparecieron los adelantos, no cambie de parecer, se veían muy infantiles, un típico corto extendido sin nada que aportar, que en vez para DVD va a las salas. Aun cuando recibió muy buenas críticas, seguía sin cambiar de opinión.

En Argentina, que se estreno el 21 de junio, hizo historia. En su primer día, llevo 417.000 espectadores, rompiendo la marca de 2019 que tenía Avengers: Endgame, con 314.141 entradas, ahora ya supero el millón de espectadores (1.177.339 entradas) en apenas 3 días, siendo el sexto estreno de este año (todas de Disney) en pasar el millón. Finalmente, la pude ver el sábado 22 en la función de las 18:30, con una esperanza muy baja… fue para bien.


Toy Story 4 es una nueva victoria de la mano de Pixar y siguen demostrando que, aunque es una cuarta parte, logran mantener el ingenio, la gracia y la emoción.


Ya apenas empieza notamos que la saga, con cada entrega, evoluciono en la animación. Con esta cuarta parte, nos encontramos con la mejor animación, no solo de Toy Story… sino en lo que a Pixar se refiere. Es una preciosura visual, desde los colores y las texturas. Llega, en cierto punto, a ser realista. También hay referencias a otros films suyos, desde Monsters, Inc., Up y hasta Cars.

Se nota que con la historia trabajaron mucho. El guion es escrito por Stephany Folsom y Andrew Stanton (basándose en un argumento de ellos mismos, John Lasseter, Rashida Jones, Will McCormack, Josh Cooley, Valerie LaPointe y Martin Hynes) y, al final, toda esta gente logro una historia muy solida, como los juguetes empiezan a ser rechazados y tienen que seguir su voz interior y como logran una especie de metáfora del significado de la vida, especialmente con el nuevo personaje: Forky, el juguete cuchara-tenedor descartable. Es creado por la niña Bonnie y empieza a tener un problema de identidad, es uno de los elementos más interesantes de toda la película.

Los guionistas siguen manteniendo la gracia y simpatía de todos los personajes de la saga, pero los agregados no son molestos y son igual de efectivos que los clásicos, especialmente: Ducky y Bunny, ellos se llevaron la mayor parte de las risas de los espectadores que estuvieron ese día, ya sean niños o adultos.

Me gusto que cerraran un hueco argumental que hubo en la anterior, como si desde el 2010 lo tuvieran planeado: ¿Qué paso con Bo Peep, que no aparecía en la anterior? Su historia de fondo resulta interesante, como ella se independiza.

Y otro personaje que resulta llamativo es Gabby Gabby. Es la villana de esta historia, teniendo un plan que te termina encariñándote el personaje, sobre todo su última escena que en cierto momento puede llegar a las lágrimas.


La única critica que tengo con ella, es que algunos de los personajes clásicos, aunque siguen siendo muy graciosos, no tienen tanta presencia en pantalla. Por ejemplo, Sr. y Sra. Cara de Papa carecen de dialogo, están como adorno y las apariciones de Buzz Lightyear se basan en un mismo chiste.

También podría decir que el guion, aunque es muy bueno, no llega a la altura de las anteriores. Si la comparamos, esta entrega pierde por medio punto en calidad, pero…

(Sigo en Spoiler por falta de espacio, no cuento el final)