Para mi, como para mucha gente, 'El exorcista' sigue siendo sinónimo de 'terror'. En mi caso, desde que la vi de chaval, y realmente no he pasado tanto miedo con una película en mi vida. ¿El tema religioso, tal vez? Si, aunque solo en parte.

'El exorcista' marcó un antes y un después en el género del terror. En cierta forma, fue un giro hacia la seriedad. Había antecedentes al respecto, y quizás el más significativo sea 'Rosemary's baby' de Polansky. En Inglaterra, la Hammer había dado ya lo mejor de sí y ahora el cine americano debía adaptarse a los tiempos. La segunda mitad de los años sesenta había subvertido por completo el mundo cultural; ahora había otras inquietudes a las que atender. Hay una tesis básica acerca del cine de terror, al menos en el cine de género, y es que los miedos que reflejan sus películas corresponden a los miedos de la clase burguesa a lo largo de las décadas. En los años setenta, con el cambio generacional, uno de los mayores miedos era la llamada neurosis familiar, la desestabilización en el seno de la familia. Ahora los miedos no se encontraban en castillos encantados, sino dentro de los hogares de bien. Esto es El exorcista, y por eso uno de sus mayores aciertos es que buena parte de la acción trascurra en el dormitorio de la niña, una niña mimada hija de una actriz de vida ligera y despegada de lo tradicional. Pero lo tradicional, en forma religiosa, vendrá a llamar a su puerta. Algo huele a podrido en la familia burguesa americana...

Pero lo mejor de El exorcista no está en la temática, sino en el desarrollo de la trama, que nos hunde más y más en el miedo, siendo además testigos mudos de la angustia de una madre que no sabe lo que le pasa a su hija, ni cómo curarla. También tenemos a un cura - el Padre Karras -, mi personaje favorito de la película, con problemas de fe y una terrible culpabilidad encima. Gran trabajo el de este actor, Jason Miller.

En los aspectos negativos, quizás algunos momentos efectistas, tremendamente escandalosos en la época de su estreno, e incluso hoy en día. Pero esto es sobre todo al final. Sustos, afortunadamente muy pocos; el terror aquí no se basa en los sustos. Maquillaje, excesivo. El terror y el mal rollo que se ganan en el desarrollo del film, se pierden en el climax: el Demonio sobreactúa. En resumen: quizás ha sido un poco sobrevalorada dentro da la historia del cine, en general, pero por su importancia histórica y por el miedo que nos sigue dando a algunos, 'El exorcista' es ineludible para los amantes del género de terror.

Lo mejor: La primera parte del film.
Lo peor: La última parte.