En este ciclo de directores que estoy haciendo para formarme sobre cine en general, he decidido empezar por Ruben Fleischer, algo particular, ya que si alguien escuchara lo que digo pensaría: "Pero ponte a directores buenos como Scorsese, Coppola o De Palma", y yo diría que "tienen razón", pero es que quería empezar por un director simple, un director con el que no me comiera la cabeza y así ha sido. Llevo echas ya tres críticas a películas de Fleischer si cuento esta y estoy viendo que es un director el cual siempre tiene material interesante, pero que también siempre se queda a medias en lo que propone. Le pasa con películas como Venom o Gangster Squad. Y cuando las llega a desarrollar le quedan productos tan divertidos como Bienvenidos a Zombieland o esta 30 Minutos o Menos.
La película arranca con una escena donde vemos un coche de un repartidor de pizza, personaje interpretado por Jesse Eisenberg, que corre para llegar a tiempo a un reparto mientras suena una canción que alegra la escena y aparecen los títulos de crédito. Esa escena nos presenta al protagonista, un hombre que pasa de todo, incluso de tener un buen trabajo y su preocupación más grande es beber cervezas mientras ve películas de los ochenta. No hay que saber más del personaje, no es necesario. En escasos diez minutos nos presenta el que va a ser el protagonista durante los poco más de ochenta minutos que dura el filme.
En está ocasión, Ruben Fleischer nos presenta una película corta, rápida y simple, como el resto de sus películas, las cuales no tienen prácticamente ninguna ni un ápice de complejidad. Son todas muy planas en ese sentido. La cosa es que hay propuestas en las que eso funciona, donde no es necesario complicar las cosas y simplemente te quieres sentar a ver durante hora y media, una comedia que es divertida y que te va a hacer no pensar.
Las situaciones cómicas de está película están bien logradas, yo por lo menos me he reído más de una vez, sobre todo con el personaje de Aziz Ansari, que es muy divertido o con el personaje de Michael Peña, que logra parodiar a esos asesinos a sueldo latinos con cadenas y tatuajes, cosa que le da un punto divertido a la película.
Los dos antagonistas son bastante ridículos en general, cosa que es intencionada, pero que a mi no me funciona y cada vez que aparecen restan a la película.
Las pocas escenas de acción son interesantes, como las persecuciones en coche, que son pocas, pero la puesta en escena en las mismas es lo que consigue que sean fáciles de ver y se entienda todo. Aunque yo me quedo con la escena del atraco al banco, la cuál es la mejor de la película, y con motivo, porque sabe aprovechar la comicidad de sus personajes y hace de ella una escena donde te consigues reír a carcajadas.
En resumen, esta es una película que no busca más que hacerte pasar un buen rato además de corto, ya que como dije su duración es tan solo de una ochenta y tres minutos. Va a lo que va, no se anda con derroteros y eso se agradece. Porque en una época en la que existen películas que duran dos horas y media o tres horas, por el simple hecho de ser largas, es necesario películas que duren lo que tengan que durar y se acaben.
El guion consigue ser divertido e incluso en su simpleza nos da situaciones de cierto drama que no desentonan, los actores están bastante bien todos en general y la puesta en escena es rápida y directa, como la misma película. Cuando a Fleischer se le dan este tipo de propuestas, se luce, porque es lo suyo. Así que esperemos que siga por este camino y no se dedique a hacer películas más "complejas".