Lo peor de lo peor. Mira que soy bastante entusiasta de gran parte del cine español y me cuesta hacer una crítica tan brutal pero es que la película no tiene pies ni cabeza. Sólo puede entenderse medianamente desde el mundo del absurdo, los personajes son completamente increíbles, los diálogos imposibles; los protagonistas se pasan todo el tiempo hablando pero no dicen absolutamente nada, y además hacen unas cosas completamente absurdas. Esa hija dedicada en cuerpo y alma a perseguir al padre, a ver qué hace. Unos personajes extrañísimos, de repente aparece un pelmazo que se le cuelga a la niña en todas partes y ella, en lugar de quitárselo de encima y mandarlo a paseo, como haría cualquiera, se dedica a contarle su vida y a dar largos paseos con él. El novio de la niña que se pasa la vida en la calle mirando una tienda cerrada... Por favor, es que se trata de una serie de escenas inconexas por completo que me imagino que querrán representar algo, pero yo terminé de ver la película con una cara absolutamente pasmada y sin haberme enterado de nada de lo que pasa.

Confieso que no conseguí comprender el tipo de relación entre el padre y la madre, y entre los padres y la hija en ningún momento. No entiendo cuál es el problema de la niña, pero mucho menos el de la madre. Al final el padre cuenta una historia para no dormir que se supone que sería la explicación de todo, pero la realidad es que te quedas todavía más a cuadros. A la luz de esa información, todo se vuelve aún más absurdo y ya sí que los pies y la cabeza no aparecen por ningún lado. En fin, de verdad, que si os la perdéis, no os perdéis nada. Considero esta película sólo apta para amantes del enigma irresoluble y para insomnes; sueño garantizado.