28 de agosto de 2019
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Obra maestra de Alfred Hitchcock, una película angustiosa en la linea del tipo de películas que hacia este gran director. Un juego con la cámara, los planos, la fotografía. Todo impecable, una clase sobre como hacer una obra maestra del celuloide.
La película trata de la relación entre dos extraños que se conocen en un tren, el titulo no deja nada a la imaginación, la relación entre ellos. Aunque el verdadero protagonista es uno de ellos, Bruno Antony, un perturbado que se cruza en el camino de un tenista famoso y que se obsesiona con él, con una amistad falsa. Un psicópata interpretado por Robert Walker.
El maestro Hitchcock tubo la genialidad de dar ese papel protagonista a un actor que tenia problemas psicológicos en la realidad, un acierto casual o no. El actor falleció el mismo año que se estreno esta película en circunstancias poco claras.
El personaje de Bruno da mas miedo que muchos villanos del cine. Un hombre solitario a la sombra de su padre y con una madre demente que pinta cuadros espeluznantes.
La pareja formada por Farley Granger y su prometida en la ficción Ruth Roman completan esta historia sobre la locura de un hombre capaz de asesinar, un viaje por la mente de un loco que Hitchcock rodó con maestría en blanco y negro, en los años cincuenta, cuando ya se rodaban películas en technicolor.
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