Que salieran Robin Williams y Joel McHale en la película era un buen gancho para atraerte. El trailer también prometía la comedia típica navideña con situaciones disparatadas, un poco de drama y el final navideño de siempre pero he de reconocer que me ha decepcionado bastante.

Al principio parece que el argumento puede ser divertido con lo de “vamos a casa de mis padres por navidad” (con todo lo que conlleva) pero luego empieza el argumento soso, sin gracia ninguna (o yo no he visto la supuesta comedia) y ese batiburrillo que teóricamente mezcla el drama familiar con las risas con esos supuestos gags cómicos.

Me ha aburrido horrores y no la recomiendo. Una pena que fuera una de las últimas películas de Williams antes de morir… afortunadamente dejó un gran legado cinematográfico con el que continuar disfrutando.