Después de la decepción que me llevé con "La semilla del diablo" mis esperanzas de encontrar en "John Carpenter's The Thing" un nuevo referente en el género del terror eran bastante escasas. Por suerte estaba equivocado. En este magnífico cuento terrorífico del director americano se nos traslada a la Antártida, donde un grupo de personas que forman una expedición son asaltados por dos extranjeros que disparan insistentemente a un perro desde un helicóptero. Tras una serie de acciones, este grupo, liderado por Kurt Russell, decide descubrir la razón por la que los extranjeros actuaban así...

Con esta base, Carpenter consigue que durante dos horas suframos la opresión del frío y el vacío que sentiría este grupo de personas en esa situación, la angustia de los hechos que suceden en esa base -de forma similar a Alien-, y si bien no aterrarnos, si sorprendernos. Pese a que es una película de terror lo cierto es que al menos a mi no me ha dado sustos ni nada similar, claro que la he visto ahora -con 20 años- y no de crío, por lo que imagino que no será lo mismo. Eso si, hay que reconocer que la galería de criaturas o monstruos deformes es sublime, tremendamente bizarra, seguro que más de un crío tuvo que dormir con la luz encendida después de ver esta película.

La ambientación es sublime, tanto las imágenes, el uso de la cámara, la música del genio Ennio Morricone... todo lo que se refiere a material técnico es de primera. Lo único que la aleja pues de una mayor nota es, para mi, la cantidad de lagunas argumentales que hay. Si bien me gusta ese final abierto, no me creo para nada lo que sucede antes de llegar a él, y por supuesto habría estado bien algo de información sobre este grupo, la razón por la que están en la Antártida. Aún así, es una auténtica joya que aún a día de hoy mantiene el tipo, y por cierto, sublime la reacción de las personas ante una amenaza. Un estudio sociológico que se saca Carpenter de la manga de forma bastante subliminal, pero no por ello menos meritorio.