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Voto de Caith_Sith:
5
Cine negro. Acción. Thriller En las sórdidas calles de Sin City, un hombre busca venganza. Dwight (Josh Brolin) trata de ajustar cuentas con la misteriosa Ava Lord (Eva Green), la letal mujer que le traicionó. Nancy intenta superar la muerte de Hartigan, y Johny tiene una peligrosa misión: acabar con el mayor villano de Sin City. En su propósito, conocerá a la joven stripper Marcy (Julia Garner)... (FILMAFFINITY)
2 de octubre de 2014
13 de 19 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cuando en 2005 apareció en cines "Sin City", se convirtió rápidamente en un éxito gracias a su combinación de sólida narrativa, imponente aspecto visual y un reparto de altura. Con el paso de los años aquel film ha demostrado saber mantenerse fresco, algo que jamás le sucederá a esta secuela tardía que firman Robert Rodriguez y Frank Miller a cuatro manos, como la original, donde también participó Tarantino. No sé si porque falta este último o porque sencillamente la cosa llega demasiado tarde, pero esta "Una dama por la que matar" demuestra el declive de sus dos responsables, como si hiciera falta algún tipo de confirmación tras sus esfuerzos individuales recientes (la infame "The Spirit" de Miller y la floja "Machete Kill" de Rodríguez). Si le sumamos a todo esto que las ideas son bastante escasas, tenemos un combo ideal: una secuela innecesaria en la que, no obstante, brillan algunos momentos individuales.

"Sin City: Una dama por la que matar" nos vuelve a mostrar a algunos de los personajes del film original, pero son justamente éstos los que tienen las historias menos interesantes, recayendo lo mejor del film en las nuevas presencias. Eva Green, destinada a salvar casi cualquier película floja en la que aparece, tiene aquí un papel hecho a su medida, el de una femme fatale que saca provecho de su imponente físico para volver locos a los hombres y llevarlos a la perdición, previa manipulación en favor de sus intereses, claro está. Cada vez que aparece en pantalla el blanco y negro se resquebraja para mostrar tonalidades de grises, adquiriendo el film una inyección de vida que el resto de sus minutos apenas pueden rozar.

Otra buena incorporación es la de Gordon-Levitt, con un personaje al que se le dedican pocos minutos pero que ofrece suficientes impulsos como para verdaderamente merecer la pena. La historia de la película es la de un barco a punto de hundirse: personajes que circulan por el borde de la desesperación en una ciudad del pecado en la que el mayor 'pecado' es, en efecto, la propia existencia de un producto que nace como una extensión a favor de explotar una marca pero que llega extraordinariamente tarde y es incapaz de alcanzar los registros de la original a cualquier nivel posible. Rosario Dawson, Juno Temple y Eva Green hacen lo posible por despertarnos de nuestro letargo pero la película apenas roza el aprobado. Se puede ver, como ocurría con "300: El origen de un imperio", pero ambas están tocadas de muerte por el mismo arma: ser incapaces de estar a la altura de la obra precedente, pareciendo realizadas por gente ajena a ese mundo. En el caso de "300" se podía entender, pero aqui, no.
Caith_Sith
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