Como amante empedernido de la ciencia ficción, tenía puestas algunas ilusiones en esta película: pensaba encontrarme con un Jeff Bridges fantástico, disfrutar de algún momento cómico propiciado por el extraterrestre que se mete en el cuerpo de un humano, deleitarme con la magia y originalidad del maestro Carpenter a la hora de plantear lo hipotético de una visita alienigena, etc. Lamentablemente en mi opinión este film no pasa de ser correcto. Entrañable en alguna escena y con unas actuaciones de lo más normales, aunque por momentos se pueda vislumbrar algún destello propio de alguien de la talla interpretativa de Jeff Bridges o Karen Allen.
La película es un poco tediosa en ocasiones, aunque este tedio se alterna con escenas bonitas, entretenidas o interesantes; incluso la banda sonora me ha resultado demasiado pesada en gran cantidad de momentos (no con ello estoy afirmando que sea una banda sonora mala, pues durante gran parte del metraje es acertada y coherente).
Me da mucha rabia decir esto, pero lo mejor de la película para mí ha sido algún detalle propio del mejor Jeff Bridges y el poder haber disfrutado del poderío visual-interpretativo y la increible belleza de Karen Allen. Una verdadera pena porque la historia podría haber dado bastante más de sí.