Fui a ver la película con mucha ilusión puesto que prácticamente se hablaba de ella en todos los medios y parecía prometer. El resultado es otra decepción más de la irregular carrera de este director, capaz de codirigir una verdadera obra de arte como "Sin City", al mismo tiempo que hace infantiladas previsibles y patéticas como Kill Bill y ahora está improvisación barata, sin profundizar en los personajes, absurda y, en muchos momentos, horriblemente larga.
Tiene algún momento brillante, todo hay que decirlo, pero es una absoluta mier****.