Muchas películas nos hemos encontrado a lo largo de los años que no ofrecen nada nuevo y apenas divierten. Abusan de las fantasmadas, los tópicos y son carentes de emoción en sus personajes bastante planos y unidimensionales con actuaciones similares a zombis. Este año hemos tenido un ejemplo como San Andrés, carentes de realismo, de riesgo y de sorpresas. Agente 47 se podría asemejar en cuanto al propósito de la cinta. Llenar las arcas de dinero de la manera más fácil, entreteniendo al personal pero no de la manera más digna. El Hitman que hubo en 2007 no es que fuera algo espléndido pero al igual que esta, es entretenida y tiene sus momentos aunque reconozco que las escenas de acción están mejor rodadas aquí y los personajes mínimamente son más interesantes que la cinta francesa de EuropaCorp. Como le ha pasado este verano a Terminator Génesis y Las pruebas que acaban siendo un refrito de películas que ya hemos visto, Agente 47 logra aprobar desde mi punto de vista en el apartado visual pese a sus carencias en el CGI aunque hay que entender sus 35 millones de presupuesto también. Ni siquiera los actores son un punto a destacar quedando casi como sin vida en varios momentos. El final sin spoilear deja claro que el dinero es lo que quieren recaudar y a poder ser hacer franquicia cual Resident Evil.
Como ya dije, Hitman: Agente 47 es entretenida y se pasa un rato agradable con coreografías bien rodadas a la luz del día y slow motion siempre agradable a los ojos cual videojuego, pero no deja de ser un conjunto de Matrix, Transporter, X-Men (la chica me recuerda mucho a Jean Grey por sus habilidades) y por supuesto la parte inicial a la primera de Terminator. Si la otra era un Jason Bourne pelado, esta es un conjunto más amplio y más entretenido pero igualmente absurdo y fantasioso que solo sirve para desconectar el cerebro hora y media y poco más. Pasable.
Destacar la banda sonora de Beltrami, no tiene tema memorable pero acompaña bien y planos bastante curiosos gracias a una destacada fotografía.