Al ver que Michael Bay la dirigía (aunque no lo parezca, me gusta la trilogía Transformers) me empezó a llamar la atención, además de ver el reparto conocido y completo, despertó mi interés aún más por esta película. Pues bien, me he llevado una gran decepción y más viendo que me encanta el género de las catástrofes. Como bien digo, la cinta peca de duración, si bien a mí me gustan las películas largas, eso no quiere decir que lo deban ser todas. Habrá gente que dirá que es una americanada, que es cierto que lo es, pero así es el cine de Hollywood, el capi américa, 2012, independence day, battleship, invasión a la tierra y muchas más son también americanadas. Eso no se puede evitar teniendo a directores como Michael Bay y Roland Emmerich haciendo pelis de necesidad de soldados americanos, esto es lo que hay y sabéis lo que vais a ver. La película contiene diálogos absurdos y muy vistos por parte de Ben Affleck (sigo diciendo que es un mal actor), Liv Tyler (no brilla tanto como lo hizo en El señor de los anillos) y de Bruce Willis (por algo fue nominado a los premios Razzie). Frases de humor estúpido y un romance prescindible en una película en la que se pedía más acción y más suspense y no finales tan predecibles como éste. El único actor decente del potente reparto es Steve Buscemi que le da su toque de humor al que todos intentan imitar en la película como Michael Clarke Duncan u Owen Wilson, que en esta película actúan fatal. La película peca de situaciones vergonzosas, diálogos absurdos, un guión muy visto y de excesiva duración y a ratos aburrida. No entiendo como una película puede ir a los oscar por los efectos y a los razzie por la interpretación y el guión, no acabo de entenderlo, o una cosa u otra. En fín, una película más para mi visionado totalmente prescindible y que espero que no me disgusten las otras cintas pendientes de Michael Bay que me quedan (Bad boys 2, La isla y La roca).