Deja la imaginación volar.
La película me ha gustado, pero los veinte minutos finales te dejan un sabor agridulce en el cuerpo. La verdad es que la historia tiene cierto parecido con Narnia en cuanto al mundo imaginario, pero nada más. Aquí se mezcla realidad e imaginación a partes iguales.
Los efectos especiales están muy cuidados, y las persecuciones en el mundo de Terabithia me recordaron a algunas secuencias de El Retorno del Jedi.
La banda sonora original está muy bien, y las canciones están muy bien colocadas durante la película.