...para vivir rodeado de tan excelentes y admirables hobbits.

Ésa es una frase de una de mis películas favoritas, seguro que la gran mayoría sabéis a la película que me refiero y muchos la habréis visto, pero lo que casi todos estaréis pensando es qué pinta esa frase en esta crítica, a decir verdad ni yo mismo sé realmente por qué la uso aquí pero me vino a la cabeza, jaja.

Y es que empecé a pensar que esta peli de Georges Méliès tiene ya 111 años, me parece una barbaridad la de tiempo que hace y yo que la acabo de ver no digo que sea lo mejor que he visto en mí vida, pero realmente me parece asombroso que después de 111 años a mí me parezca como poco una historia divertida y que entretiene y eso es el cine, seguro que eso es lo que buscaba Georges Méliès hace 111 años con esta peli y aun a día de hoy consigue su objetivo, impresionante.

Eso señores para mí es el cine, donde lo principal es conseguir entretener o sin duda lo era hace 111 años, todos sabemos que a día de hoy eso es algo que a muchísima gente no le basta y no seré yo quien lo discuta, el cine por suerte ha evolucionado desde sus inicios en todos los sentidos y esperemos que siga evolucionando, pero si esta peli hoy consigue entretener, a mí al menos sí, imaginaros lo que debía ser hace 111 años.

A día de hoy es la peli más antigua que he visto y me ha gustado y como decía antes 111 años no son nada... pero lo son todo y cambiando un poco la frase mencionada antes y para terminar mi crítica decir que 111 años no son nada para vivir rodeado de tan excelentes y admirables películas como ésta. Creo que sin duda merece la pena y dura muy poquito así que la recomiendo a todo el mundo.