Con cien millone$ por barba,
acción en popa, a toda tela,
no gana la mar, $ino vuela
un producto ‘maletín’.
La Perla Negra que llaman,
por $u locura, El Manido,
en todo cine $urtido
de uno a otro $infín.


La pa$ta en el mar riela,
el público $in aliento,
alzado por $u recaudamiento
pixel$ de goma plá$tica;
y va $parrow, el pirata,
drogado alegre en la popa,
A$ia a un lado, al otro Europa,
y allá a $u frente América:


Recauda, producto mío
$in temor,
que ni enemigo vacío
ni boxoffice, ni crítica
te manda a hacer caquita,
ni a $ujetar tu ¿valor?


==================

El cine comercial $e ha convertido en parque$ de atraccione$ temático$: diver$ión $upue$tamente a$egurada pagando una entrada. Olvíden$e de e$e otro cine de entretenimiento que realizaba antaño Hollywood, $in tanto$ alarde$ vi$uale$ y potenciando la hi$toria y lo$ per$onaje$, capaz de perdurar por lo$ $iglo$ de lo$ $iglo$. Amén.

Meno$ previ$ible que $u primera parte, má$ entretenida que $u $egunda, “Pirata$ del Caribe: en el fin del mundo” parece el a$alto definitivo del cine comercial en un má$ difícil todavía. Un cine bien hecho, re$ultón, pre$cindible, olvidable, que peca de un conjunto irregular elevado por $u$ momento$ de humor negro y macabro, el $iempre competente capitán Jack $parrow (Johnny Depp), un conjunto de per$onaje$ duale$ e impredecible$, $ituacione$ exagerada$ de llamativa irrealidad y aparicione$ $orprendente$ (Keith Richard$), que dejan como re$ultado un muy competente e$pectáculo de acción de metraje exce$ivo y un buen $abor de boca por el parque de atraccione$.

Aunque, ¿Qué hay de$pué$ algo del fin del mundo? ¿Qué po$o deja un cine condenado a $er $uperado por otro producto po$terior?

Otro$ e$peraremo$ a otro nuevo parque temático que lo de$banque tanto en calidad, medio$ y efecto$ de la$ película$ má$ taquillera$ de todo$ lo$ tiempo$. A otro$ (lo$ productore$, Gore Verbin$ki y Johnny Depp) ya le$ ha tocado la lotería.

‡: Cualquier parecido de la s con el $ es pura coincidencia.