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Estados Unidos Estados Unidos · Raccoon City
Voto de Maldito Bastardo:
7
Terror. Intriga. Thriller A mediados de los años treinta, dos hermanos gemelos viven con su familia en el campo. Son muy diferentes entre sí, aunque pasan mucho tiempo juntos. De repente, empiezan a ocurrir extraños sucesos en la granja donde viven y sus alrededores. (FILMAFFINITY)
17 de agosto de 2012
12 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
Algunos hablan de “El Otro” como una película maldita, que genera culto debido a su tema y la manera de abordarlo. Se pierde esa moralidad absurda de “La mala semilla” y su componente de dedo divino lanzando rayos asesinos teledirigidos. Su potencial psicológico no nos ubica como jueces sino como simples e inmóviles espectadores. No es un retrato descriptivo repleto de sangre ni de violencia y, pese a ese aire de fábula, no hay efectos especiales que realcen tal efecto. El filme de Mulligan sigue siendo una pesadilla en un campo de sueños indómito que nadie ha conseguido superar. Nos hallamos ante ‘El otro’ terror. Un terror en off, apreciable pero no visible del todo… como si la mismísima muerte se encontrase a nuestra espalda y fuéramos conscientes del reflejo de su afilada guadaña por el rabillo de nuestros ojos.

Robert Mulligan adaptó la novela homónima de Tom Tryon con apenas un año de vida en papel y le otorgó imágenes alejadas de cualquier imposición preconcebida. Es cierto que el único precedente previo era “La mala semilla” (1956) de Mervyn LeRoy y quedaban años para que llegara el evil-baby crecidito de Rosemary en “La Profecía”. Pero los recursos que utiliza el director de “Matar a un ruiseñor” son psicológicos, nunca fantásticos. La película se formula sobre dos premisas: ese ‘Gran Juego’ que propone la abuela a Niles para ser los ojos de otro ser y el truco de magia para escapar de un encierro utilizado por el mago ‘chino’. Sobre esos dos elementos se genera una cinta de terror psicológica donde también el horror es escondido en ese personaje malicioso y asesino. Tal vez con el ‘accidente’ que provoca el infarto de esa solitaria vecina rompa el punto de vista preestablecido, aunque genera una secuencia atrevida y remarcable.

Puede que para el espectador actual que se quiera asomar a “El Otro” se encuentre marcado por el pasajero oscuro de Dexter Morgan e infinidad de cintas que harán que los giros narrativos les parezcan previsibles. No obstante, se retrata una supervivencia claramente psicológica y mental donde se marca una maldición y desasosiego en el espectador. Los personajes acaban convirtiéndose en fantasmas de su tragedia. Perdidos y atrapados al otro lado del cristal del que ya nunca podrán escapar.
Maldito Bastardo
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