No recomendable, salvo que te gusten las películas indies de personajes con problemas existenciales.

Es la típica historia de personajes excéntricos que como la ponen en un Festival Indie adquiere un profundo (y falso) poso filosófico. Estoy seguro que habrá un montón de videos por Internet que harán análisis sesudos de esta dramedia, de hecho la obra no tiene un género muy definible, sino un cierto estilo existencialista a Doctor en Alaska y que recupera la ilusión de vivir viviendo en un entorno natural medio rural.

Un ingeniero casado de Chicago (John Turturro que tiene pinta de intelectual judío que congenia con el personaje) que graba todos sus pensamientos en una grabadora dirige un proyecto en un pueblo de los Estados Unidos profundo que se cancela. Escucha una conversación entre sus trabajadores que lo critican, pero uno comenta que le da pena. Entonces empieza a tener alucinaciones sobre su vida, si es auténtica y cosas del pasado.

Eso lo hace pensar.

Entonces tiene un medio accidente con un hombre Davy tipo David Croquett que vive medio aislado de la sociedad, que vive en mitad de una pradera norteamericana, en plan Jeremiah Johnson todo lo que puede, sin muchas de la comodidades modernas, un tipo buen enrollado, tranquilo y conoce a su vecina con apariencia de solitaria Catherine Keener está interesada en él desde el principio pero como personaje no está muy bien explicado.


Siguen hablando y el ingeniero se da cuenta de lo prejuicioso que es.
Son personajes arquetípicos. Después uno espera que la cosa evolucione, sin embargo todos los hechos importantes
El spoiler contiene spoiler.