Muy valiosa como retrato de época tratado desde la honestidad y con una naturalidad entrañable. Aparte de ello, por momentos se hace larga y su aroma de Gran Reserva, se siente mancillado por una leve pero incómoda reminiscencia rancia. La trama no tiene mucho, aunque quien la está viendo, sabe que eso no es lo importante, pero para mí termina convietiéndose en un lastre más pesado de lo que intuía.
Su mejor baza es el enfoque de inicio de relación de la pareja protagonista, sus condicionantes y la característica rigidez formal que encuadraba aquella hermética sociedad. Eso sí está bien conseguido, más aun que la alienación laboral que era evidente, tal que siempre, pero que, en aquellos tiempos, más que constituír el germen, no era más que otro lineal dibujo haciendo juego en la coreografía general de todos los estamentos sociales.

Consistentes interpretaciones, pero excesivo metraje y abuso de primeros planos del rostro del protagonista, para un logrado documento de gran realismo y valor como crónica social, pero que tampoco me ha llegado mucho más allá.