Una historia que gustó a la Warner, y la historia que se había escrito recibió una oferta para venderla como novela, y así fue.

Metieron a Errol Flynn porque aún encandilaba a las mujeres, y el western no tenía público femenino en los cines, y pensaron que atraería al público femenino poniendo a Flynn delante de las pantallas. Aún así no lo consiguieron del todo. Tuvo un éxito moderado.

Flynn y Sheridan tenían problemas con la bebida, y la grabación de la película fue muy difícil por dominarlos, y eso que Walsh ya lo sabía de antemano y dijo que tendría la cuerda muy corta para controlarles, sobre todo a Flynn que ya tenía fama. Pero... no lo consiguió.

A parte de que hubo recortes en el guión al ton ni son y creo que eso se ha notado en la película, y entre una cosa y otra, la película apenas tiene final, pero la gente tampoco se dió cuenta.

La película va perdiendo fuerza a medida que avanza, aunque para mí, tampoco tiene un principio sólido en el que sostenerse. Quizás quisieron homenajear a aquello de que en EEUU hay segundas oportunidad y el sueño americano.

Quizás, para mí, donde peor se lleva la película es el cambio de opinión de la protagonista. De odiar al prota a quererlo. No hay un proceso, aunque las películas de los años 40 se ve a una mujer que sólo se enamora si el hombre la acosa. En fin... es por eso que no la apruebo.