Esta película, para mí, tiene dos partes. La parte más "poética y reflexiva" y la otra parte más de "película normal". La parte más poética es la que más me ha gustado, con pocas palabras en voz en off y viendo esas imágenes y con esa música, a mí me transmitía mucho, o también me transmitía lo que el personaje siente con esos sentimientos. Para mí ha sido una nueva experiencia que no había vivido aún en el cine.

La otra parte, la más "normal", es la que narra (bueno, tampoco narra, ya que muchas veces sale la parte más poética de la historia), es la que menos me gustó, ahí se me hizo algo pesada y larga. Para describir la relación de padre e hijo, creo que ha sido muy denso y lento. Está bien por el enfoque del niño, como lo ve todo y como reacciona a diferentes estímulos tanto de la madre, del padre y del hermano (que el tercer hermano es como de comodín, porque apenas tiene importancia en la historia).

Además, cuando en el principio, se ven esos sentimientos, y luego esa grandeza de la creación del mundo o de donde venimos, para acabar en una historia muy concreta me ha parecido que ha sido desperdiciar esa grandeza en algo tan concreto, o... también podría que ser todo la grandeza del mundo tiene la misma importancia y se ve reflejado en esta historia concreta.

Es una película que el director ha querido hacerla grande para que cada uno coga su propia inspiración. Pero como estoy un poco contrariado (y tampoco me han dado ganas de volverla ver en un futuro), en la nota he sido bastante duro.