Brutal imagen. En su día fue elogiada por su nítida imagen en blanco y negro, pero no es solo eso, es que la cámara está muy bien posicionada siempre, hace unos movimientos y unos enfoques y unos encuadres sublimes. Dignos de Alfred Hitchcock.

La tensión es muy buena, aunque me recuerda a películas anteriores en las que la película es prácticamente en tiempo real y la tensión ocurre en lugares muy concretos y cerrados.

Glenn Ford ha sorprendido en el papel de villano, algo nada típico en sus películas, y le ha quedado genial. Van Heflin hacen un buen papel también, me ha sorprendido, había visto el remake, pero realmente la original es muy buena.