En conjunto la película queda como una mezcla de trozos, sin continuidad ni sentido entre ellos.
Sucede así porque el Director no es capaz de contar la Historia y todo lo reduce a escenas más o menos fragmentarias, algunas muy destacables desde el punto de vista cinematográfico, pero la gran mayoría algo pesadas y requetevistas. En resumen, toda la película se hace lenta y en algunos momentos aburrida.
Sin embargo, hay que destacar a los actores, todos muy bien, con algún que otro diálogo brillante e interesante; porque son los que consigen mantener un mínimo de interés para poder llegar al final.
No es para verla dos veces.