Nuestro amor a la vida, y por lo tanto al sagrado Tiempo, es tal que no podemos aconsejar de ningún modo ni a nuestro peor enemigo que pierda ni un segundo de su existencia en este inconmensurable CHURRO sin sentido, ni del humor, ni de ningún tipo.

Nefasta, con muchísimas recreaciones en lo cochino... Esta "cosa" -por llamarle algo al engendro que lo único que se asemeja a una película es el material con que está hecho- nos quita la esperanza en el ser humano en general y en el cine en particular.

Parece que se ha puesto de moda el que un par de colegas, hartos de vinate y aburridos en un bareto, decidan hacer una película a ver lo que sale... sin guión, sin nada... A improvisar lo que se les vaya ocurriendo... Eso sí, llamemos a Gerard Degordieu, para que llene -en sentido literal- la pantalla.

MIerda, mierda y mierda para Francia y su puñetero cine basura y su cultura prepotente.

Por favor, que se pueda votar con votos negativos, que resten de la media.