Hackman tiene a línea de tiro al secuestrador de su mujer ¡dos veces! y pasa de dispararle, como si lo quisiera guardar para el final (sus compañeros se lo recriminan, pero es algo que la película no lo concreta).

Por otro lado, las escenas están alargadas y estiradas, que no tienen mayor interés que el de mostrar desangrarse, sufrir y perecer a personas malheridas, sobre todo en la segunda mitad. Una pena porque la película había empezado bien, con rudeza y brusquedad, pero este guión venía bien para un metraje de duración menor, pues hay tiempos muertos en los que no ocurre nada interesante.

No me parece creíble, esos rifles de alcance de 700 metros, la mira telescópica vale, te permite ver. Pero que esos cacharros de apariencia tan rudimentaria disparen con tanta precisión desde tan lejos... Creo recordar que en ninguna película de esos tiempos he visto nada igual.

Hackman está bien, llena lo que puede con su presencia su un tanto unidimensional rol de hombre cerril, empecinado, maltratador y sanguinario. Al personaje de Reed se nos lo quiere hacer ver como a alguien relativamente bueno y honorable, todo lo que su condición de maleante le permite. El matiz de que quiera aprender a leer lo hace más querible a los ojos del espectador (bueno, excepto para cartegenero_humilde, que con la característica sutileza que gasta al expresarse, nos permite ver, entre otras cosas, que prioriza la lealtad matrimonial en cualquier circunstancia) además de poseer cierta sensibilidad y ser aguerrido a la vez. Vamos, como el bueno de la peli pero sin serlo del todo.

La relación entre Reed y Bergen no es acertada, primero esta lo rechaza durante demasiado tiempo (relleno de metraje, se nota), a pesar de que se nota que el hombre la quiere tratar con buenas intenciones, la trata incluso mejor que el bestia de Hackman, solo quiere que le enseñe a leer, pero luego, cuando se enamora de él, no percibo mucha química, pero eso diría que es más culpa de un guión sanguinario, que impone a la pobre ante un mismo escenario, que e ir a viendo expirar, no sin pocos padecimientos, a todos los hombres de Reed.

La película tenía potencial para ser una de las buenas, por su desacomplejada estética, que no busca limitar a ceñirse a un enfoque blando y convencional, pero se queda en tierra de nadie por todo eso que he ido comentando, a mi me parece más bien floja.