Haz click aquí para copiar la URL
España España · Málaga
Voto de Kaori:
5
Acción Tras haber llevado a cabo diversas misiones, el agente especial Ethan Hunt (Tom Cruise) se ha retirado del servicio activo y se ha prometido con su amada Julia (Michelle Monaghan). Pero, cuando es secuestrado uno de los agentes entrenados por él, volverá de nuevo a la acción. También tendrá que enfrentarse a Owen Davian (Philip Seymour Hoffman), un individuo sin escrúpulos que trafica con armas y con información. (FILMAFFINITY)
13 de enero de 2013
8 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
Esto ha sido mortal: Tom Cruise y Jonathan Rhys-Meyers juntos en la pantalla. Yo ya no sabía ni a quién mirar, y entre músculos, ojos claros, varoniles rostros, labios arrebatadores, seductoras sonrisas, corbatas deshechas y camisas remangadas, he estado a punto de padecer un particular síndrome de Stendhal. La hecatombe ha sido la aparición de un Ethan Hunt con sotana hasta los pies, mientras por otro lado el compañero Declan escala sudoroso y acalorado por las catacumbas del Vaticano. Mortal.

J.J. Abrams dirige esta tercera entrega de Misión Imposible y remonta el bache que supuso John Woo. Cambia el estilo y cambia el tono de la saga, y con ello va cambiando también nuestro héroe protagonista, quien no se parece en nada al Ethan sofisticado de «M:I-2» y sólo de pasada al Ethan espía de la primera; por cambiar, aquí ha cambiado hasta de chica. El romance no me parece cursi, a no ser que por cursi entendamos a dos personas que se quieren. De hecho, el desenlace no deja de ser sorprendente y distinto a otros finales bastante predecibles, y la descarga eléctrica impacta lo suyo.

El guión no es que contenga lagunas, no; es que son, directamente, océanos. Creo que es la trama más enrevesada con diferencia, aunque también es verdad que despista, como mínimo, en un par de ocasiones en las que no te ves venir los acontecimientos, y que, al final, suprimiendo algunas explicaciones que, o no dan o dan mal, la historia acaba encajando aunque sea a presión. Otras veces, nos toman el pelo y se creen que no nos damos cuenta de lo que nos ocultan, como por ejemplo el robo de «la pata de conejo», que, estrictamente hablando, no sale.

Mención especial merece un Philip Seymour Hoffman que causa escalofríos sin que derrame ni una gota de sangre. Brutal lo de este actor. ¿Javier Bardem no se habrá inspirado en este personaje y su interpretación para hacer de villano en la última de Bond? Encuentro sospechosas similitudes, incluso en el cabello rubio.

El rato pasar, se pasa, ya que funciona como cine de evasión y entretenimiento con cierto gusto, y si no, siempre te quedarán los actores. ¡Divinos actores!
Kaori
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow