Haz click aquí para copiar la URL
España España · Málaga
Voto de Kaori:
6
Comedia. Drama En 1939, a punto de estallar la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), el extravagante Guido llega a Arezzo, en la Toscana, con la intención de abrir una librería. Allí conoce a la encantadora Dora y, a pesar de que es la prometida del fascista Rodolfo, se casa con ella y tiene un hijo. Al estallar la guerra, los tres son internados en un campo de exterminio, donde Guido hará lo imposible para hacer creer a su hijo que la terrible ... [+]
19 de agosto de 2012
10 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
De verdad que no comprendo que alguien pueda tan siquiera sentirse ofendido, dolido, ultrajado o indignado por esta película a cargo de un Roberto Benigni completamente histriónico. Creo que interpretar así «La vida es bella» es una equivocación.

Benigni no frivoliza en ningún momento con el Nazismo ni con el Holocausto; ni con la muerte, la violencia o el racismo. De hecho, el acontecimiento histórico y sus muchas injusticias se muestran desde la crítica y la denuncia. No hay comedia cuando ve la montaña de cadáveres, desaparecen sus compañeros o cuando se encuentra con el oficial alemán de los acertijos. Él no se evade de la realidad: la endulza, la esconde, la trasviste, la transforma. ¿O es que creéis que cuando le explica al niño lo de los mil puntos se lo cree de verdad? Lo que hace Guido es intentar, en medio del drama, no perder el optimismo ni el amor hacia la vida, tanto por él como (sobre todo) para ayudar y sostener a su familia. No sé dónde está el ultraje.

La idea, y en esto creo que todos coincidimos, es una preciosidad. La vida a través de los ojos de un niño tiene un sin fin de posibilidades y suele ser siempre bonito. Lo realmente polémico de «La vida es bella» es la poca consistencia histórica y argumental. Cierto que el campo de concentración es de chiste, y tanto padre como hijo andan bastante sueltos. ¿Es un error muy grave? Pues no sé, porque también es verdad que el estilo y el tono no buscan la verisimilitud ni la lógica, sino el sentimiento. Otro punto discutible es el exceso de minutos en la primera parte de película, teniendo en cuenta que básicamente sirve para presentar a los personajes y no tiene la fuerza de la segunda mitad.

Sí creo, en cambio, que la historia llega a emocionar, con toda su ternura, sus cuentos, sus mentiras y sus fantasías. No es «La lista de Schindler», pero tampoco lo pretende, además de que sería imposible.

Así, a su manera, con sus peculiaridades a la italiana y con sus buenas intenciones, transmite (y de eso se trata) lo bella que es la vida. Pase lo que pase.
Kaori
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow