Vamos a contar mentiras.

Nos encontramos con una película que podríamos definir como "americanada"; Una vez más Hollywood decide meterse a contar su versión de la Segunda guerra mundial, evidentemente mienten, como suelen hacer habitualmente.
Cuando en 1950 se preguntó a Europa quienes habían sido los héroes de la segunda guerra mundial, la mayoría de la gente solía decir la URSS, gracias a Hollywood dicha opinión ha cambiado radicalmente, y este film es el claro ejemplo de lo que hablo.
Un pequeño tanque americano, con unos soldados curtidos en la guerra a excepción de uno de ellos, planta cara a prácticamente una sección del ejército nazi, casualmente el ejército mejor preparado de toda la guerra. Partiendo de esto, empiezan las mentiras y los fallos a nivel histórico. Pero obviando estos detalles llegamos al final de la película, tras innumerables muestras de americanismo en forma de bala, y nos quedamos con cara de tontos, Rollito épico, muy heroico, pero intragable.

Brad Pitt en su línea, pero al resto del reparto podemos definirlos como abortos cinematográficos.

Saben lo peor de todo? Que en 6 meses sacarán otra película semejante para seguir afianzando esa falsa aceptación del americano como salvador de Europa. Les cagaría en el pecho.