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España España · Tarragona
Voto de Tabrisechoes:
10
7,4
1.239
Documental Augusto y Paulina llevan juntos 25 años. A él le diagnosticaron Alzheimer hace ocho años. Ambos temen el día en que deje de reconocerla.
10 de enero de 2024
8 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
El documental de Maite Alberdi tiene "algo" que nos hace darnos cuenta que no estamos viendo "Ordinary Love" (2019, dirigida por Lisa Barros D'Sa y Glenn Leyburn con guión de Owen McCafferty). En ambas se muestran las sombras del cariño (creo que "cuidados" es un término que, no sé por qué, está degenerando y cada vez soy más reacio a usarlo) pero se expresan de forma diferente. En ambas el tiempo está esculpido, pero notamos diferentes características de la escultura final. No es porque una sea ficción y la otra un documental basado en la vida de dos personas que existen. En la gran pantalla o todo lo consideramos ficción o todo lo consideramos real (entre comillas). Nos creemos lo que vemos o no conseguimos submergirnos en la experiencia fílmica. Pero, repito, hay algo que nos conmueve más en una que en otra. La persona espectadora tendrá toda una vida para intentar dar respuesta a ello.

Intentaré justificar el título de mi crítica: siempre hay que intentar ver algo a remarcar aunque sea en la película que más has disfrutado en años. El resultado de mi reflexión destinada al fracaso es que a más avance la tecnología, más deleguemos el cariño (o quede obsoleto) y sigan con lista de espera las residencias (públicas y privadas); quizás esta película quede como material para la asignatura futura de "Historia de la Medicina" donde se explicará que antes lo que hacía la gente enamorada era estar-ahí con quien no se puede hacer más por él / ella que eso. Las estudiantes se horrorizarán tanto por lo que pasó Paulina como por la angustia de Augusto ante el vacío (tanto existencial como cognitivo). Esperemos que este obra chilena no quede como vano recuerdo de las lecciones que antes los seres humanos sacábamos ante el dolor. Sobre todo, el del otro / de la otra.

Mi deseo inconfesable (aunque lo pongo aquí y no en spoiler): poder curar el Alzheimer (y todo lo que venga después, y lo que hay ahora) pero no opacar nuestra finitud humana. Sin la contingencia de nuestras vidas, no es que valoraríamos esta película con un 0. Es que no hubiera podido hacerse porque la pre-ocupación por la fragilidad de nuestros pares estaría transfigurada en la des-preocupación de quien nada teme porque el tiempo se ha congelado (sí pasa en balde, dado que no le afectaría). El transhumanismo tiene el poder de erosionar el tacto. El arte es suficientemente desvalido como para realizar creaciones como éstas. Aunque la frase suene arquetípica, nos toca elegir. La elección infinita.

Feliz 2024 y mis deseos para las lectoras de Filmaffinity de que este sea su mejor año. Con esta película empezaremos con buen pie. Veamos qué tal los pasos.
Tabrisechoes
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