Haz click aquí para copiar la URL
España España · MADRID
Voto de ELZIETE:
10
Cine negro. Drama Retrato desolador de la injusticia y el sufrimiento humanos causados por el sistema penal de los Estados Unidos vigente tras la I Guerra Mundial. (FILMAFFINITY)
14 de marzo de 2015
5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
La cinta no solo es "la madre" de todas las películas del género carcelario, sino un modelo a seguir de narración, de como contar una historia llena de acontecimientos en apenas hora y media de forma técnicamente impecable y no aburrir lo más mínimo. La fórmula exitosa de aunar el cine de los grandes estudios de Hollywood con la denuncia social. En su planificación, desarrollo y trabajo actoral es una película moderna que no chirría lo más mínimo 83 años después de su estreno. Todo ello realizado por un director polivalente de esos que se consideran como artesanos y que a la postre son los que han firmado la mayor parte de los hitos del séptimo arte.
Basado casi con exactitud, excepto en su final, en el libro autobiográfico de Robert E. Burns, plantea las dificultades de un veterano de la I guerra mundial para encontrar un empleo acorde a sus méritos en unos USA camino de la depresión y cuyo sistema judicial en algunos estados como el de Georgia condenaba a 6 u 8 años de trabajos forzados en condiciones de esclavitud a quién como Burns robó un inmenso botín de 5 dólares, mientras las "altas esferas" se lo llevaban crudo. Salvando las distancias, la cosa no puede ser más actual.
El tono casi documental de la vida carcelaria, la emoción de las fugas, su reinserción social encubierta, la miseria de quien se aprovecha de ello y sobre todo la inmisericordia de un sistema que necesita la brutal represión sin ánimo de redención donde siempre tiene que haber un culpable sea el verdadero o no.
Paul Muni, el Robert de Niro de la época da un recital de por donde llevar las técnicas actorales superado el cine silente. Un brillante montaje que se hace invisible y una fotografía magnífica acaban de cerrar el circulo de un trabajo intachable cuyo valiente y arriesgado final de moraleja más que inquietante no fue óbice para que fuera un gran éxito comercial que tuvo el poder de acabar con los penales denominados Chain gang (cadenas de presos). En una década, la de los 30, de tantas grande películas pioneras, "Soy un fugitivo" ha quedado un tanto injustamente olvidada. Como a James Allen, hay que hacerle justicia.
ELZIETE
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow