Partiendo de la base de que el género de terror, al menos como ha llegado a estandarizarse desde hace décadas, no es santo de mi devoción, acudo puntual a las citas que nos ofrece Paco Plaza. Está es un salto cualitativo en su trabajo, cada vez más sutil y depurado, con gusto por los detalles y la puesta en escena. Todo ello se lo pone en bandeja el guion marca de la casa de Carlos Vermut que se permite incluso un guiño a su "Magical Girl".

No me interesa tanto lo que cuenta, sea idea original o no, sino como lo cuenta Plaza y su equipo, con un estupendo trabajo de iluminación a cargo de Daniel Fernández Abelló que viene a sustituir a Pablo Rosso habitual director de fotografía de Plaza.

El físico espectral de Vera Valdez es inquietante y Almudena Amor demuestra que puede abordar varios registros, aunque su dicción no deje de chirriarme.

Envejecer es una putada, para uno mismo y para quien tiene que cuidarnos. Y a veces unos y otros harían lo que fuera por liberarse de ello.

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