No sé cuántas veces la he visto ya. Seguro que ocho o diez, es probable que doce o catorce. Da igual. Uno no se cansa de ver una obra maestra. Además es una película que allí donde zapeo me detengo en ella.
Espléndida Bergman, magnífico Grant, impresionante Rains... Todo está como debe estar, en su sitio, sin que sobre nada, sin que falte nada. Se hace corta, debería haber tenido algo más de metraje.
Preciosa.