Antes de ir a ver esta película hay que olvidarse de que es un remake, porque a los que les dan mil patadas en el estómago que los americanos reversionen películas europeas no podrán disfrutar de una más que aceptable cinta. Una historia bien contada, con escenas realmente dramáticas y de esas pelis en las que sólo hay diálogo cuando es necesario. Un poquillo más de metraje no hubiera venido mal, sobretodo para ver la evolución de Portman y las niñas que por cierto, lo hacen muy bien y tienen importancia en la historia.

Fenomenal Natalie Portman, su mejor actuación hasta la fecha y muy bien Jake Gyllenhaal en un papel que no da para muchos lucimientos. Tobey Maguire no está mal, pero es que con la cara que tiene cuesta mucho imaginárselo en plan padre de familia, y mucho más de héroe de guerra. Pero qué le vamos a hacer, no es culpa suya.

Es un film bastante realista sobre las secuelas de la guerra y las relaciones familiares. Y ahí va mi blasfemia: me ha gustado más que El Cazador.

Por cierto, en los créditos hay una joyita de U2.