Una buena película de ciencia-ficción, con las dosis justas de acción y agradablemente distribuidas en las 2 horas de la película. J.J. Abrams retoma el testigo de la saga con un entretenido film que trata con cariño la historia y sus personajes, gran mérito de su director, en una época donde los remakes y adaptaciones de series de nuestra vida no dejan más que decepciones en la gran pantalla.