American Horror Story viene a recoger historias propias del cine de terror fantástico y jugar con sus elementos a lo largo de la temporada. Cada temporada cambia el panorama, siendo éstas autoconclusivas, y en la que nos ocupa la historia es la de la casa embrujada.

Lo cierto es que no convence, los capítulos, todos, van de más a menos y el final es una tomadura de pelo. En cada episodio se nos presenta un evento pasado que tendrá relación con los sucesos que veremos lo que resta de capítulo, y a medida que la trama avanza aumentan las preguntas mientras se dan algunas respuestas. Así mismo, hay una línea argumental principal en la cual convergen las secundarias que vemos en cada trozo.

El problema principal de esta temporada concreta es que su desenlace es horripilante. La trama estaba más o menos construida, había lazos sin atar y las vivencias de la familia protagonista en la casa eran de un surrealismo que resultaba divertido. Se trataban varios temas, siendo los principales la infidelidad y la familia. Los entes fantasmales de la casa parecen basar sus acciones en que los diferentes miembros de la familia se dejen arrastrar por la tentación, por sus pasiones y deseos, mientras la familia está a punto de romperse por las mentiras de unos y desgracias de otros. En sucesos anteriores de la casa, vemos como otras familias pasaron por sucesos similares, no logrando ninguna superar la prueba, por así decirlo.

El tema está bien iniciado y desarrollado. Pero en el último capítulo se olvidan de todo ello, no le dan el final reflexivo y potente que una trama así requería y al cual parecía dirigirse. Pero es que además misterios a los que se había dado importancia ni siquiera la tienen, no queda ni un cabo atado, hay personajes que al final no pintaban nada ahí, etc. Es un final sin final y, sin entrar en detalles, además es un mal final, porque lo peor no es que no cierre subtramas, sino que traiciona el mensaje que estaba construyendo y no es justo con los personajes y su desarrollo a lo largo del viaje.

Parece un producto a medio pulir. Lo mejor de todo son las secuencias de apertura de cada episodio y la intro, misteriosos y de mal rollo. Las interpretaciones rinden a buen nivel en general, y la verdad es que es entretenida. Podía ser mucho más, con menos vueltas, menos personajes e ideas claras, podía quedarse en simplemente entretenida, lo que es durante tres cuartas partes, y podía ser una idea desaprovechada sin rumbo fijo y final indefinido, que es lo que resulta ser en su conjunto.

Puede que debiera fijarse más en lo que narraba y menos en meter guiños a películas de terror cada cinco minutos. Hay personajes que directamente no tienen sentido y cambian de personalidad de un capítulo a otro, cosas sobre la casa que no quedan claras y se suceden incoherencias basadas en reglas que no son tales. Me quedo con los inicios y la historia del cirujano.