La verdad es que yo me esperaba terror y supongo que todo el público que empieza a ver un inicio prometedor de una película cuya localización podía haber dado mucho juego si el director y guionista se hubiera ceñido a ese género, pero no, lo que tenemos aquí es un drama con toques de terror, «dramaterror» si quieres llamarlo así. Digamos que el terror es el diez por ciento de toda la película, y de ese diez, el ocho por ciento todo al final. Lo demás es un drama sobre un hombre que vuelve de la cárcel e intenta rehacer su vida junto a su hermano y se mujer de la que está separado por el tiempo que pasó en la cárcel.

Yo creo que tiene un tres con cuatro a día de hoy porque está catalogada como de terror, si le hubieran puesto drama pues el público al que iba dirigido cambiará mucho y puede que pudieran valorar más este tipo de película. A mí me gustó, si hay algo que me gusta de las películas de terror —y en general— es ver cómo se relacionan los personajes, cómo actúan entre ellos. En una película de terror es aún más importante porque cómo vas a pasar angustia y terror por unos personajes que ni te van ni te vienen. Eso aquí está muy bien hecho.

La música es tema aparte, a mí me encantó, creo que todo lo que se oye es country; country folk, country rock, country punk... De hecho el protagonista se canta un temazo junto con la chica al final de la película casi y la verdad es que canta muy bien, no sé si será cantante. También me gustó la localización, sureste de estados unidos, o esa pinta tiene.

Total, que me gustó la parte de drama pero me decepcionó la parte de terror que es casi inexistente, un seis, aunque recalco que no es de terror, juzgo otras cosas para ese seis.