Para la crítica de cine, todo famoso cantante es mal actor. No hay excepción. Madonna demostró ser buena actriz al trabajar con grandes directores como Abel Ferrara, Alan Parker y Warren Beatty. Con directores con menos talento (como ese Guy Ritchie) ella tiene un rendimiento correcto, que no compromete de modo alguno la calidad de la película. Pero para los críticos, la simple presencia de un actor de éxito en el mundo de la música ya compromete la calidad de una película, a punto de algunos afirmaren que no existe una sola película buena en la filmografía de Madonna. Qué tontería, ¿verdad?
Esa nueva versión del clásico de Lina Wertmüller es inferior al original, mas aún así es una buena película. Los críticos no perdonaron a Ritchie el hecho que él no tenga mantido la luta de clases que habría en la película original y que tenga hecho sólo una historia de amor convencional adaptado al gusto del público actual. Ridículo. Hay que entender el contexto en que fue hecho ambas películas. Y más: si Ritchie hubiese mantido casi todo de la película de Wertmüller los críticos lo acusarian de haber hecho una copia del original. Para ellos no hay nada cierto.