La película de 1972 dirigida por Francis Ford Coppola es para muchos la mejor película de todos los tiempos. Yo voy un paso más allá, creo que ‘El Padrino’ es la perfección hecha película.

Paramount Pictures (gracias a Albert S. Ruddy) se hizo con los derechos de la adaptación de la novela de Mario Puzo del mismo nombre. La película nos presenta a Vito Corleone, el capo mafioso al mando de la Cosa Nostra en la ciudad de Nueva York en los años 40 y todos los trapos sucios que manejaban tanto él como su familia.

Ya desde su escena inicial se nota que no estamos ante una película convencional. Sale el logo de Paramount, suena la melodía de Nino Rota y un hombre (Bonasera) le pide ayuda a Corleone el día de la boda de su hija, le pide que mate por él. La justicia nos la hará Don Corleone. Éste accede a ayudarle con el propósito de conseguir algo a cambio. Y desde ahí es cuando llegan las escenas más míticas de la película. La escena de la cabeza de caballo, el tiroteo de Corleone, la comida en el restaurante de Michael… podíamos citar una tras otra y es que si existe la perfección cinematográfica ‘El Padrino’ llega a ella.

Al espectáculo ayuda un reparto inmerso en la historia. ¿Qué decir de Marlon Brando ante la que es la mejor interpretación de su carrera (y puede que de la historia del cine)? Su forma de hablar, caminar, interactuar con cada uno de los personajes… estamos ante uno de los grandes maestros de la interpretación. Solo podemos ver y aplaudir.

Al lado de Vito sus tres hijos: Al Pacino, James Caan y John Cazale. Pacino es una revelación. Lleva con gran aplomo el proceso de transformación de Michael, de casi no querer formar parte de la familia a pasar a ser el elegido para suceder el trono de su padre. En la otra baza James Caan, el hijo temperamental, que dice lo que piensa cuando no debe y cuya muerte es una de las escenas más míticas del cine americano. ¿Y John Cazale? el más débil de los hijos que tiene algo que esconder más adelante. Y no me olvido de Robert Duvall como Il Consigliere Tom Hagen.

El film encumbró a Coppola en el Olimpo de los directores siendo un éxito de crítica y público. Continuó la historia en otras dos entregas de las que hablaremos próximamente. Hoy en día aún le preguntan si va a hacer ‘El Padrino IV’ pero parece que el tiempo para eso ya pasó. Para eso están los clásicos, ¿No? Para volver a verlos una y otra vez. Este es uno de ellos.

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