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Voto de Josh Diaz:
9
Drama Aydin, un actor jubilado, dirige un hotelito en Anatolia central con la ayuda de su joven esposa, de la que está muy distanciado, y de su hermana, una mujer triste porque se acaba de divorciar. En invierno, a medida que la nieve va cubriendo la estepa, el hotel se convierte en su refugio y en el escenario de su aflicción. (FILMAFFINITY)
13 de noviembre de 2014
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Uno de los dos grandes estrenos de esta semana y de los más esperados para los más cinéfilos es la última obra del cineasta turco Nuri Bilge Ceylan, quizás el mejor exponente de cine en su país, o al menos el que tiene más prestigio a nivel internacional. Y es que la mayoría de sus películas han sido premiadas en el festival de Cannes: tras ser distinguido con el FIPRESCI por "Los climas", como mejor director por "Tres monos" y obtener el gran premio del jurado por "Lejano" y "Érase una vez en Anatolia", su penúltimo film, por fin se alzó justamente en el pasado festival con el máximo galardón, la Palma de Oro y el FIPRESCI por un drama majestuoso, íntimo, preciso. En las películas de Bilge Ceylan, como por ejemplo las excelentes "Lejano" o "Tres monos", el paisaje exterior, sobre todo el invernal, ha tenido importancia, pero no como aquí, en que los personajes se protegen en su hogar del frío pero espectacular ambiente de la estepa de Anatolia. Su fotografía gélida contrasta con la luz que emerge de la casa del protagonista, un hotel donde conviven un algo anciano hombre, su esposa más joven y la hermana de éste, que se acaba de divorciar. Entre ellos se forma un interesante triángulo familiar donde se destapan temas como la inestabilidad de un matrimonio, la compasión, la culpa o el aspecto económico, con largas pero productivas conversaciones o también discusiones, algo que recuerda al mejor Ingmar Bergman. La referencia de Chéjov también se encuentra en esta obra profunda en que pequeños actos de violencia desencadenan en retratar el lado oscuro de los humanos. A pesar de transcurrir tres horas, la película tiene su ritmo tranquilo, que no resulta pesado, el espectador va entrando en un ámbito intimista e intenso, a lo que contribuyen las submergidas interpretaciones de los intérpretes Haluk Bilginer, Melisa Sözen y Demet Akbag. En definitiva, esta bella, compleja y grandiosa obra gustará a los más seguidores del mejor cine de autor, a aquellos espectadores dispuestos a dejarse llevar con serenidad por una excepcional muestra del cine como arte.
Josh Diaz
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