Comedia policiaca realmente cautivante, risueña y desenvuelta; que explota a las mil maravillas el carisma de sus dos actrices protagonistas (y su gran e inesperada química) y erige unos diálogos y situaciones cómicas de lo más agudas.

Aun así "Cuerpos especiales" es lo que es. No engaña, y se nos presenta como un producto de entretenimiento ligero pero simpático siempre que puede... y el caso es que su comicidad funciona. Ahora bien, "Cuerpos especiales" cuenta con el problema de sustentarse en una fórmula trillada que, en sus puntos de seriedad no puede evitar ser previsible y simple.

Y que estamos ante una "buddy-movie" en toda regla (esas comedias que juntan a dos personajes de carácteres opuestos pero que se ven obligados a convivir y que poco a poco forjarán una amistad), en la que esta vez dos agentes de policía totalmente antagónicas deberán unir fuerzas para atrapar a un traficante de drogas. Y esa trama troncal del traficante pues es simplona total, sin que presente ningún tipo de esfuerzo en sus detalles, a ratos desordenada, y con poca emoción, interés o intriga.

Pero ese sería el único "pero" que se le podría poner a esta cinta. Porque aunque previsible, la trama de caza al criminal siempre está en constante evolución, al igual que la trama paralela que narra la relación que se va forjando entre las dos policías. Es esta faceta del film lo que más funciona de manera triunfal.

Por un lado tenemos a Sandra Bullock que haga lo que haga no lo puede evitar: cae bien delante de las cámaras. La actriz interpreta con vivacidad a una agente del FBI "de manual" (seria, distante y eficiente) y elegante que comanda patrullas y resuelve crímenes eficazmente, pero con una vida personal aburrida. Y por otro lado tenemos a Melissa McCarthy que rebosa carisma como policía local de Boston macarra, campechana, deslenguada, espontánea, irreverente y muy divertida, que hace las cosas a su manera y totalmente fuera del manual. Ambas chocan por su conflicto juridisccional y por que las dos comparten el "ir de sobradas" por sus comisarías.

Ya por separado, las dos intérpretes se lucen con un ingente carisma (en especial McCarthy. Atención a sus tronchantes momentos con sus detenidos), pero ya juntas forman una combinación inesperadamente sensacional. Su estupenda química y genial presencia engrandecen unas situaciones y unos diálogos chistosos de lo más ocurrentes y desternillantes. No por nada los momentos de jarana que comparten en la cinta son los mejores y más hilarantes. Los secundarios por su parte se desenvuelven todos ellos perfectamente, creando sarcasmo con entusiasmo con sus interpretaciones en los diálogos y momentos de humor (ya que a estos secundarios les tocan los momentos de humor más tópicos y vistos).

La cinta cuenta además con una buena realización (aunque no destaque demasiado), una ambientación satisfactoria y una estupenda elección musical.

Y así, entre agilidad y jocosidad, "Cuerpos especiales" va dejando muchísimas risas y otra buena tanda de carcajadas, con un humor que funciona en varios visionados y que deja lucirse de maravilla a sus protagonistas en la parodia. "Cuerpos especiales" es muy recomendable para disfrutar de un poco de diversión irreverente (porque eso sí, el libreto no hará devanarse los sesos a nadie).

Dentro de las "buddy-movies", "Cuerpos especiales" es de las mejores que he visto. Me ha divertido y la he disfrutado con creces de principio a fin. Su gran éxito de taquilla es comprensible, y ya se prepara secuela.

Lo mejor: Los diálogos de humor y como los lleva a la pantalla una insuperable Melissa McCarthy. La química entre McCarthy y Bullock.

Lo peor: Los momentos de tiros, secuestros, etc. de lo más tópicos.