Si buscan algo nuevo o destacable en el cine de acción... aquí no está. Cinta de acción monótona, infantil, esteril, ridícula y (lo que es peor) bastante plomazo.

Que conste que las buenas películas de acción que buscan el puro entretenimiento me gustan... digo las buenas (Newell debería haber revisado antes "Jungla de Cristal" para recordar que se puede crear SUSPENSE o ENTUSIASMO dentro de una simple secuencia de acción). Incluso disfruté como una jabata de la reciente y mediocre "Furia de Titanes" de tan poca chicha argumental pero que me supuso un culpable entretenimiento. Si aquella la comparé en su día con un aceptable castillo de fuegos artificiales, ésta resulta un cúmulo de petardos y pirotecnia barata demasiado vista.

Se nota que es de Disney por su trama tan tópica y pueril, y se nota que es de Brukeheimer por ser insignificante en dosis desmesuradas. No es la nueva Piratas del Caribe (esa saga al menos tiene altas cantidades de humor y un personaje protagonista singular... ambas cosas brillan por su ausencia en esta nueva saga), más bien se parece a la saga de "La busqueda".

Reconozco que me aburrí soberanamente con una cinta a la que solo le pedía entretenimiento con un mínimo de interés. La trama (que ya se sabía que sería tonta y simple) se desarrolla a la largo del metraje pobremente, avanzando a paso de caracol y siempre redundando en la misma estupidez, con alargadas escenas de acción que serían espectaculares de no ser porque son excesivas y acaban siendo un coñazo sin tener mucho sentido en el desarrollo de la historia.

Los diálogos son, por supuesto, de lo más estúpidos y todas las escenas que no envuelven acción están ridículamente teatralizadas con la banda sonora insertada de forma desacertada en los momentos dramáticos que al final resultan irrisorios, y con unas interpretaciones sin alma ni tino (en "Prince of Persia" podrá ver a Gyllenhaal en su peor y más insulsa actuación. También podrá ver a un Ben Kinsley de risa como villano de tebeo sin pretenderlo. Por no hablar de las malas actuaciones secundarias y de la escasa química entre actores que hacen del típico tonteo entre el protagonista y la mujer florero de turno algo de lo más forzado y ridículo)

Todo tiene aire a serie B aun sabiendo que se han gastado el oro y el moro para hacerla (por eso me decepciona). Y ver a este personaje de videojuego luchar contra traiciones entre reyes y príncipes más simples que el mecanismo de un chupete, atravesar la puerta 1, 2 y 3 tres del juego y recibir algún bonus entre salto en salto resulta poco o nada interesante en el 90% del metraje.

Es cierto que se pueden rescatar un puñado de buenos efectos especiales (sobre todo los chulísimos que envuelven fuego) y un par de minutos de expectación por su trama... ¡pero un par de minutos en dos horas!.

Lo mejor: Los efectos especiales que envuelven fuego hecho por animación.
Lo peor: El guión. La poco química entre la pareja protagonista.