Cinta de ciencia-ficción con viajes en el tiempo en la que Tom Cruise de nuevo vuelve a salvar al mundo o el día (como cada año: el año pasado con "Oblivion", el anterior con "Jack Reacher", el anterior con "Misión imposible"... y no es que me queje, en algunas cintas a veces Cruise salva el mundo con un digno recreo para el espectador, Y "Al filo del mañana" es una de ellas). En ella Cruise se pone en la piel del teniente William Cage un publicista del ejército con pánico a la batalla que se verá obligado a combatir contra una invasión alienígena, en una batalla que no para de revivir una y otra vez tras morir hasta que consigue perfeccionarse... a lo Bill Murray en "Atrapado en el tiempo (aunque Cruise no aporta el carisma de Murray a su personaje, claro está. La estrella norteamericana interpreta solemnemente al personaje... pero tampoco con una presencia inolvidable. Al contrario que otras opiniones, el actor me resulta bastante monocorde en esta cinta, y lo prefiero en otros personajes como Lestat, Jerry Maguire o Stacee Jaxx. Afortunadamente Cruise es acompañado por una Emily Blunt en ascenso que se convierte en una roba-escenas en toda regla como ya hiciera en "El diablo viste de Prada", y que tiene el papel más agradecido del film).

Y es que "Al filo del mañana" no cuenta con un argumento original ni mucho menos: para empezar hablamos de una adaptación de una novela de Hiroshi Sakurazaka, que se adecúa en la pantalla con influencias de numerosas cintas mejores que este duplicado. El film bebe principalmente de la genial "Atrapado en el tiempo" (quien sea fan de aquella cinta sentirá una sensación de deja-vu tremenda) pero tampoco deja de rememorar en su estética a la saga "Alien" o a "Salvar al soldado Ryan" y su desembarco en Normandía. Y por supuesto, sus personajes tienen una clara referencia a los videojuegos futuristas.

Estas trilladas influencias afortunadamente no molestan en ningún momento (pues se ajustan para conformar un relato de ciencia-ficción ameno) pero pueden hacer que, por momentos, el espectador avezado pierda apego hacia este relato que, desde luego nos encontramos desarrollado con mayor profundidad, intimismo, ingenio, inteligencia y humor en la película de Harold Ramis, donde los personajes se construyen con más ahínco y ardor, se aportan reflexiones meditabundas y su comicidad resulta más cómplice y atinada. Y si se trata de buscar films de ciencia-ficción más sorpresivos e ingeniosos, también resulta más gratificante revisar "Alien" o "Star Wars". Y es que, si a "Al filo del mañana" se le quita toda su espectacular pirotecnia (lo mejor de la cinta sin duda: su diseño artístico, su fotografía y sus efectos especiales) y su resplandeciente purpurina, nos encontramos con que no hay mucho más donde rascar. Porque el metraje decide emplear su espacio más en la acción pura y en la estrategia militar (tampoco memorable) que en una notable edificación de sus personajes y sus conflictos (¡lo que hubiera dado de sí el personaje de Tom Cruise y su transformación interna!), así que al final tira de diálogos tópicos y situaciones cachazudas que poco pueden interesar en más de un visionado.

Sin embargo Liman no permite que la sensación de resabido y vulgar acabe por desesperar al espectador, y consigue que esta aventura sin un fondo bien elaborado, este lance épico ínfimamente sustancioso se conforme como un útil entretenimiento. El director regala un metraje rutilante, de eficaz compás en sus viajes en el tiempo, de edición hábil, de grandiosa puesta en escena (con un buen concepto gráfico (aunque tome referencias de otros films, resulta completamente elegante) con una notable plasticidad en su visión apocalíptica) y de espectaculares efectos especiales.

Así, "Al filo del mañana" se convierte en una distracción veraniega tan fútil como momentánea, pero que cumple su cometido de agradar sin convertirse ni muchísimo menos en una obra maestra de la ciencia-ficción.

Lo mejor: Su estética, su montaje. Emily Blunt. Que consigue ser un ligero divertimento durante su visionado.
Lo peor: Su falta de originalidad en la premisa y la poca profundidad en el desarrollo de personajes y situaciones (la cinta se centra más en la acción, a veces estirada, si mucho seso).