... los minutos finales en el tren son apoteósicos. Y todo lo que uno no se ha reído en la mayor parte de la película, se ríe en sus minutos finales. Es más, aunque sean pocos momentos, rara vez me he reído tanto por segundo en una comedia (aunque solo haga gracia la primera vez que se ve).

Lo cierto es que todos los actores se ponen al servicio de la comedia de manera magnífica, y si bien los pobres no tenían muchas escenas graciosas al principio con las que trabajar, al final cuando se juntan todos en el tren, se nota lo que valen como comediantes. Eddie Murphy hace bien lo que siempre hace, Jamie Lee Curtis está muy carismática en su personaje de prostituta, Denholm Elliott está magnífico haciendo de mayordomo, y los veteranos Don Ameche y Ralph Bellamy también dan la talla interpretando a los elitistas hermanos Duke (y son precisamente sus personajes los que reciben la parodia más sonada). Pero es Dan Arknold el que más destaca de entre todos durante toda la película.

Lo peor: No es tan graciosa como se pretendía. Y, cuanto más se ve menos gracia hace.
Lo mejor: Los minutos finales (ese Denholm Elliott haciendo de cura borracho, ese Eddie Murphy orando en Africano... y esa historia del gorila enamorado que se ha hecho mítica y ha sido copiada en muchas películas y series (incluidos "Los Simpson").