No me atrajo en principio, porque su temática se asemejaba mucho a “Un lugar en el sol” (1951), de George Stevens. Este era un drama brillante, bien interpretado y con dilemas morales interesantes. Sin embargo, “Un beso antes de morir”, es otro estilo de película, más enfocado en el suspense. No tiene su calidad ni su originalidad, pero también merece la pena su visionado.

Bud Corliss es un atractivo estudiante de la universidad. Cuando su novia, Dorothy, se queda embarazada, empieza a tener dudas sobre la conveniencia de casarse con ella, pues tiene planes más ambiciosos.

Robert Wagner, el guapo sin escrúpulos, y Joanne Woodward, la novia enamorada e ingenua, compartían una secuencia que te ponía los pelos de punta (spoiler). Incomprensiblemente salía en el avance comercial de la película en 1956.

Solo en su tramo final, Jeffrey Hunter y Virginia Leith comienzan a tomar protagonismo, en dirección a un desenlace lleno de tensión.